Hubo una época, hace tres años, en que Rigoberto Urán era uno de los mejores contrarrelojistas del mundo. En el Tour de Romandía del 2013 ganó la etapa y le sacó casi un minuto a Froome. En la etapa de crono del Giro la ganó por encima de Tony Martin, el alemán que ha sabido ser campeón del mundo a cronometro. Desde el 2015 para acá el gran Rigo ha preferido preparar a conciencia la subida a las montañas que el trabajo en velódromo que hacía cuando estaba en el equipo Ettix.
He escuchado versiones que me han impresionado, gente diciendo que mañana podría poner entre las cuerdas a Froome porque ya le ha ganado, cosa que es mentira total. Froome en la primera etapa de este Tour, en apenas 11 kilómetros, le sacó un minuto . Incluso Bardet le sacó 12 segundos, y Nairo 35 segundos.
El Tour que ha hecho Urán es fantástico. No hay que agregar mas presión al antioqueño. Seis segundo escasos lo separan del subcampeonato que sería fantástico. Ganarle a Froome si es una mentira absoluta. El año pasado la mejor crono que hizo Urán ocupó el puesto 55. O sea que está peor que Nairo Quintana. No creo que tenga problemas para defender su escalón en el podio con Mikel Landa pero, con un poquito de esfuerzo y si recupera las sensaciones, podrá ser segundo en el Tour, algo que ningún antioqueño ha hecho jamás.
