Todo empezó cuando Alejandro Escallón (@bogotaeats en Instagram) vio la película Chef. El argumento de la película giraba en torno al enfrentamiento por Twitter de un cocinero con un crítico gastronómico. La pelea hizo que el cocinero se fuera de gira por todo Estados Unidos en un food truck vendiendo sanduches cubanos con su hijo. Alejandro salió de cine con la sensación de que sería un sueño tener una cuenta de Instagram que diera recomendaciones gastronómicas. El amigo con quien fue a ver la película le dijo unas palabras que fueron reveladoras: “Pues hágalo y punto”.
Hoy Alejandro es uno de los críticos gastronómicos más influyentes de Colombia. En Instagram tiene más de 140.000 seguidores y en Facebook otros 50.000. En sus redes sociales es leído por cientos de comensales que esperan sus recomendaciones para decidir qué restaurantes probar en la ciudad. Sin embargo, quiso ir más allá. A mediados de 2017 convirtió BogotaEats en una app. El proceso de desarrollo le costó más de un año de trabajo, trasnochadas y mucho estrés, pero el resultado valió la pena.
La aplicación tiene el mismo modelo de reseña que Alejandro sigue en sus redes sociales. Aparecen los restaurantes calificados con un puntaje entre 1 y 10, y sube una foto tomada con su propio celular. Además, permite que los usuarios encuentren de una manera más cómoda las recomendaciones de Alejandro. Es posible filtrarlas por precio, ocasión, zona, rating o tipo de comida. También brinda un listado de los restaurantes organizados en el mapa de Bogotá. La principal ventaja que trae consigo es el hecho de no tener que bucear en el feed de Alejandro para saber qué tal le fue en determinado sitio.
En efecto, el camino para desarrollar la aplicación de BogotaEats ha sido duro. A veces las cosas no funcionaban y tocaba empezar de cero nuevamente. Sin embargo, siente que el proceso ha valido la pena. Aunque desde el pasado mes de julio está disponible gratuitamente, la aplicación está en constante desarrollo. El objetivo es ayudar a la gente a navegar entre el mar de comida que hay en Bogotá.
Aunque Alejandro se graduó como Administrador de Empresas del CESA, la comida ha sido una de sus grandes pasiones desde siempre. Por eso no es de extrañar que haya hecho de BogotaEats su proyecto de vida. Antes había tenido experiencia trabajando con empresas como Nestlé o Red Box Pizza. En esta última fue community manager. Además de BogotaEats también está dedicado a una agencia de BTL de la cual es socio y maneja varias cuentas.
Cada vez que Alejandro va a un restaurante, lo hace como lo haría cualquiera de sus seguidores. Es decir, trata de pasar desapercibido y recibir la misma atención que recibiría cualquier comensal. A veces, los meseros no lo distinguen e ignoran el hecho de que están atendiendo a un personaje que podría disparar o enterrar la imagen del restaurante. Sin embargo, no siempre logra hacerlo. En más de una ocasión lo reconocen los dueños y le envían alguna entrada o plato especial nuevo. En tres años que lleva dedicado a comer por Bogotá, jamás ha cobrado por una reseña. Después de todo, sabe que su credibilidad es lo más importante. “Pues es que si yo recomiendo un sitio diciendo que es espectacular, la gente llega y se da cuenta de que no es así, entonces el que sale perdiendo soy yo”.