Dos comunistas venezolanos miembros de la banda de Nicolás Maduro han amenazado a Colombia con una invasión militar. Este par de sujetos son: Roy Chaderton, exembajador en Colombia, y Pedro Carreño, miembro de la espuria Asamblea Nacional Constituyente.
Sin embargo, la camarilla chavista todos los días mete alaridos sobre una supuesta invasión norteamericana a Venezuela, copiándole las mañas al tirano de Fidel Castro, quien durante 56 años se desgañitó gritando acerca de una agresión yanqui a Cuba, lo que hubiera sido como gastar pólvora en gallinazo, pues la isla representa muy poco en el concierto mundial.
El redomado marxista de José Mujica, expresidente de Uruguay, al regañar hace algunos días al Secretario General de la OEA Luis Almagromencionó: “Venezuela es reserva petrolera para los próximos 300 años y allí radica su riqueza y su desgracia, porque EE.UU. es adicto al petróleo y sus intereses presionan”.
Definitivamente este señor con sus fantasías vive en otro planeta, ya que con solo explotar la tercera parte de esas reservas la vida en la tierra no alcanzaría a 150 años por los gases de efecto invernadero, en donde el petróleo es uno de los principales contaminadores, por lo que en muy pocas décadas habrá que reemplazar el crudo y Venezuela se quedará eternamente con su petróleo.
Además, para que no quepa ninguna duda, teniendo en cuenta la recuperación de los precios del petróleo, Colombia hoy le vende más crudo a EE.UU. que Venezuela, quien disminuyó la producción a la mitad por problemas técnicos y el despido de personal calificado desde hace algún tiempo, resaltando que con el crudo que sale hacia China apenas se le pagan intereses de la gigantesca deuda que tiene con el país asiático la camarilla comunista venezolana. Esto demuestra que gracias al dinero que recibe por la venta de crudo a Estados Unidos es que todavía se mantiene el régimen castrochavista.
Ahora bien, con la crisis monumental en Venezuela provocada única y exclusivamente por el marxismo-leninismo, que en Venezuela se disfrazó de socialismo del siglo XXl, se puede afirmar que en menos de 5 años el 40% de la población estará refugiada en los países vecinos, superando el número de refugiados en cualquier parte del mundo en las últimas décadas, y convirtiéndose Colombia en el mayor receptor, teniendo en la actualidad una cifra cercana a un millón y medio de refugiados. La comunidad internacional debe ayudar económicamente, comenzando por China que envió un buque a la Guaira en Venezuela, dizque en misión humanitaria.
Y no es que Colombia sea una nación vividora como dijo el perturbado canciller venezolano Jorge Arreaza, sino que la hecatombe producida por la migración puede llevar a un problema internacional de incalculables consecuencias, así que se espera la ayuda para los refugiados venezolanos en Colombia, y ojalá dentro de los primeros países en socorrerlos estén China y Rusia, tan amigos del régimen de Maduro, quienes deberían también mostrar su comprensión con el pueblo venezolano refugiado.
Por otro lado, los mamertos colombianos no se quedan atrás y le hacen el juego a la dictadura madurista, dando voces sobre una supuesta invasión al país vecino por parte de EE.UU. y sus aliados, pero ridículamente hacen mención a la soberanía y a la dignidad en Venezuela, lo que causa hilaridad. ¿Cuál soberanía y dignidad, cuando Venezuela es una colonia cubana, cuya invasión fue permitida por el orate de Hugo Chávez para hacerles fieros a los gringos? Entonces si de invasiones se trata ya Venezuela está invadida y Maduro recibe órdenes desde La Habana, por lo que la soberanía y dignidad en la patria de Bolívar fueron abolidas por los lacayos de Cuba que gobiernan en Caracas.
Los comunistas de todos los pelambres son prisioneros del pasado, por eso en Latinoamérica repiten frecuentemente como loritos acerca de las intervenciones militares de EE.UU. en algunos países de la región ocurridas hace ya varios años, y sobre los golpes de estado contra Jacobo Árbenz en Guatemala en 1954 y Salvador Allende en Chile en 1973, principalmente. Ay, como si la historia fuera lineal, como si los tiempos no cambiaran.
Valiéndose de esa narrativa hablan de una supuesta invasión norteamérica a Venezuela, por lo que se les debe de recordar que Karl Kautsky en un escrito de 1918 titulado La dictadura del proletariado le advertía al sátrapa ruso de Lenin que lo que ha sido no tiene por qué seguir siendo. Sin embargo, los seguidores de la secta marxista tienen como común denominador la paranoia y es difícil sacarlos de esa patología.
Adicionalmente, cabe decir que la pandilla marxista venezolana utiliza también como patraña el cuento de la supuesta invasión, buscando adocenar a algunos sectores de la población y justificar el estado de miseria en que se encuentra esa nación, en donde la pobreza es cercana al 90%, pero eso sí culpan al imperio, cuando ese imperio es el que le permite todavía tener algunos recursos. En consecuencia, lo que está en mora es que EE.UU. le deje de comprar petróleo a Venezuela y que Panamá como país miembro del Grupo de Lima no permita transitar por su canal los barcos que lleven el crudo desde Venezuela hacia Asia, en especial los de la China.
Será el pueblo venezolano mediante una insurrección popular el que derroque a la dictadura comunista en Venezuela, subrayando que el espontaneísmo de las masas ante el hambre generalizada provoca levantamientos y ahí no valen las masacres, las torturas, los colectivos chavistas o los agentes cubanos que asesoran al régimen, porque ante la desesperación por el hambre la gente prefiere morir en las calles, como lo ha enseñado la historia, o sea que tarde o temprano habrá una acción de masas que erradique la tiranía y los pueblos latinoamericanos acompañados por gobiernos demócratas tendrán que ser inmensamente solidarios con la patria de Bolívar.
Para cerrar, miembros de la rémora chavista desde hace años han amenazado militarmente a Colombia, comenzando por el propio Hugo Chávez, quien decía que sus aviones Sukhoi estarían bombardeando a Bogotá en pocos minutos, por lo que el gobierno nacional debe asumir una posición tranquila pero firme, ya que los comunistas cuando están manejando un país son capaces de cualquier locura para permanecer en el poder, por eso no es descartable una agresión venezolana y hay que estar preparados.