En entrevista con Óscar Sevillano, la actriz habla del rumor de una supuesta crisis económica y estado de soledad, que por estos días le ronda.
¿Porque tan retirada del medio artístico?
María Cecilia Botero: No ha habido trabajo lastimosamente y en lo que poco que sale, siento que no encajo y que no es para mí.
¿De dónde sale el rumor de la crisis económica de María Cecilia Botero?
María Cecilia Botero: Quienes han contado ese asunto lo han hecho exagerando las cosas. Es obvio que una persona que lleva más de un año sin trabajar debe vivir de sus ahorros y ser cuidadosa en los gastos, pero lo que sí no es cierto es que esté a punto de salir al semáforo a pedir plata, como tampoco es cierto eso de que llevo muchos años lidiando problemas de salud. El hecho de tener una piel delicada, que hace que no pueda exponerme al sol durante mucho tiempo, no me pone en una silla de ruedas, ni evita que lleve mi vida con un ritmo normal.
¿Qué tanto marcó en su vida su esposo David Stivel?
María Cecilia Botero: Muchísimo. Estuvimos juntos 11 años, que si los medimos ahora podemos concluir que fue un tiempo corto, pero lo cierto es que fueron uno años maravillosos de los que quedaron buenos recuerdos y un hijo espectacular. Fue mi maestro en muchas cosas de la vida.
La muerte de su esposo, el que su hijo Mateo no esté en Colombia han ayudado a que corra el rumor de una supuesta soledad de María Cecilia Botero. ¿Qué tan cierto es?
María Cecilia Botero: Puede ser que este sola, pero no me siento sola. Que Mateo no esté conmigo físicamente no significa que esté alejado de mí. Hablo con el todos los días por teléfono, por internet, con mi familia me mantengo en constante diálogo. No padezco la soledad. Me gusta estar en mi casa y disfrutar de ella, es algo distinto y una decisión personal.
¿Quiere decir que el estado de soledad, enfermedad y crisis monetaria es falso?
María Cecilia Botero: Totalmente falso. La mejor prueba es que estoy feliz, tranquila y nos estamos tomando un café en estos momentos que no es para nada barato (Risas). No entiendo el motivo por el que salen decir eso.
¿Le gusta la televisión de ahora o prefiere la de los años 80 y 90?
María Cecilia Botero: La de ahora tiene cosas que me gustan y me disgustan al tiempo. La tecnología y el manejo de imagen, hacen que las producciones se vean más bonitas. En cuanto a los contenidos no puedo estar muy contenta. La televisión se volvió un negocio muy bueno para los dueños pero terrible para quienes la hacemos, porque se debe trabajar mucho en un tiempo muy corto.
¿Cuál de los roles que ha desempeñado durante su vida artística le ha gustado más, presentadora de noticias, actriz de televisión, cine y teatro, presentadora de magazín?
María Cecilia Botero: Soy actriz, esa es mi base y desde ese lugar he sido presentadora de noticias y de magazín y eso me ha permitido gozar todo lo que hecho en la vida. Aprender de un periodista tan profesional, serio y exigente en su trabajo como Yamit Amad en el Noticiero CMI, fue una cosa espectacular para mí.
¿Cómo es María Cecilia en su casa?
María Cecilia Botero: Soy muy casera y tranquila. No me gusta salir ni a bailar, ni a tomar. Más bien soy de mucha lectura.
¿Porque una mujer tan bonita como María Cecilia Botero y de un temperamento agradable no se volvió a casar?
María Cecilia Botero: Tras la muerte de David tuve una relación que duró casi 20 años que se terminó a comienzos de 2016. Con esto quiero dejar claro que soy una persona que le gustan las relaciones estables. Lo fui en mi matrimonio y lo fui también en el caso que acabo de mencionar.
¿Cómo hace María Cecilia para separar su vida personal de la farándula?
María Cecilia Botero: Eso fue algo que desde que inicie mi vida artística me lo propuse. Si uno se convierte en un personaje público y de fácil reconocimiento, pierde mucha vida privada, pero lo que si no hay que perder y es necesario defender a capa y espada es la intimidad. De la puerta de mi casa hacia adentro nadie tiene porque enterarse de lo que ocurre. El hogar hay que protegerlo.
¿Cuál es la fórmula para cuidarse de periodistas como Carlos Vargas, Frank Solano o Carlos Giraldo?
María Cecilia Botero: Ese es el trabajo de ellos. El periodismo basado en chismes es algo que está de moda y hay que manejarlo con cuidado. No son personas con mala intención, Carlitos Vargas es un tipo divertido, lo que hace es de buena onda. Lo que sucede es que ese tipo de periodismo a veces puede tomarse por el lado que no es, como la entrevista que me hicieron para La Red, que fue una cosa sobredimensionada en la que aparecía dando un testimonio que francamente no corresponde a la realidad.
María Cecilia se encuentra preparando una obra de teatro, ¿esta puede ser la prueba de que no está enferma en la cama a punto de fallecer?
María Cecilia Botero: Exacto. En estos dos años pude trabajar en un producciones para cine que están a punto de estrenarse y preparo una obra de teatro junto a Helena Mallarino para el 2017. Lo que sucede es que la televisión nos da a los actores una fuente de ingreso mucho mayor y al público le da la seguridad de que uno se encuentra activo, pero no es la única fuente laboral. El hecho de no estar en la pantalla chica constantemente, no significa que uno esté en la casa cruzado de brazos, ni mucho menos que esté en la cama a punto de morir.
Algunos actores de gran reconocimiento como Danilo Santos, Rebeca López, la misma Ana Cristina Botero su hermana, no se les ve en la televisión y si en cambio están dedicados al teatro ¿Es que acaso la televisión ha perdido interés para ustedes?
María Cecilia Botero: Cada vez hay más actores nacionales y extranjeros y las producciones son pocas. Esto ha hecho que personajes como yo nos devolvamos al teatro.
Se supone que el ingreso de la televisión al TLC iba a promover muchísimo más a los actores nacionales en el extranjero, lo mismo que las producciones. Con lo que usted acaba de decir, uno puede concluir que la idea no funcionó y más bien fue una cosa perversa.
María Cecilia Botero: No funcionó como se esperó. Antes de los canales privados habían muchas productoras o programadoras, eso se redujo a dos: Caracol y RCN en donde también hay películas, noticieros, novelas extranjeras que terminan por convertirlos en espacios con pocas opciones laborales.
¿Porque se interesa por el tema de la paz?
María Cecilia Botero: He sido lejana a los temas políticos, porque no me gusta la manera como se ejerce la política en Colombia, pero la paz es una cosa ciudadana, que a todos nos debe interesar. Por eso estoy ayudando y espero hacerlo bien, porque quiero que la gente sepa que me duele el país, que no soy indiferente y que quiero que mis nietos vivan en una Colombia tranquila, sin guerra, sin que nos maten o nos secuestren.
Entonces no es tan cierto el rumor que empezó a correr de que prepara campaña al Senado
María Cecilia Botero: (Risas). Dios me ampare y me favorezca. Jamás lo haría.
¿No es extraño que no se guste de la política pero que se personifique a una candidata presidencial en una telenovela?
María Cecilia Botero: Fue bonito trabajar en “Dos mujeres” con Amparo Grisales y Carlos Mata. Es el trabajo del actor, defender el personaje sin importar cuál sea.
¿Cómo es su relación con Ana Cristina?.
María Cecilia Botero: Muy buena. Ella es la menor entre nueve hermanos. Es la chiquita, la consentida a pesar de que ya no es tan pequeña. La adoro, es súper buena actriz, está haciendo teatro y le va muy bien.
¿Porque no la vimos en la “Esclava Blanca”, dirigida por Mateo Stivels, su hijo?
María Cecilia Botero: No había personaje para mí. Mi hijo Mateo fue uno de los directores y fue una producción que contó con buen rating de principio a fin sin que en ella hubiese narcotraficantes, ni cuerpos esbeltos exhibiéndose, que es una lección que debería aprenderse en Colombia. No entiendo porque nos hemos dedicado a mostrar temas que han sido lesivos para nuestro país.
Una persona tan tranquila como María Cecilia Botero como logra entablar una buena amistad con un personaje tan difícil como Amparo Grisales:
María Cecilia Botero: Amparo es difícil en apariencia. Nos conocemos desde el momento en que iniciamos nuestra vida artística, por eso puedo estar segura de que ella se armó un personaje para el público que se llama Amparo Grisales. En la intimidad es una persona sencilla, adorable, buena hija, que se preocupa por su mamá y sus hermanos.
¿Cree que producciones como “La hora del vampiro”, que fue el Drácula colombiano en donde María Cecilia era “Susi” la protagonista, se puedan realizar nuevamente en Colombia?
Fue una producción muy bonita, donde Drácula era interpretado por Julio Cesar Luna, grabado en el municipio de Guaduas. Recuerdo que mi hijo Mateo se asustaba mucho cuando le veía personificando a un vampiro. Este tipo de trabajos se podrían realizar nuevamente, porque fueron los que le abrieron la puerta en el exterior a las novelas colombianas, por eso no entiendo en que momento dejamos de hacer las cosas buenas para hacer lo mismo que hacen los demás. Hemos perdido mucha identidad.
Existe una aparente división en el medio actoral que se nota en quienes defienden la ley del Actor y otros como María Eugenia Penagos que dicen, “un momentico debemos pensar en algo integral desde la posición de artistas”. ¿Qué piensa de esto?
María Eugenia viene trabajando desde mucho tiempo atrás con el Sindicato de Artistas. Los actores somos malos para ponernos de acuerdo y si es difícil así, mucho más complicado es reunirnos con bailarines, músicos y cantantes. Ojalá se logre, pero hay que reconocer lo que desde la Asociación Colombiana de Actores (ACA) se ha podido conseguir.