De acuerdo a informaciones suministradas por Elis José Manrique, rector de la Institución Educativa Pajillal del municipio de Arboletes en el Urabá Antioqueño, los niños y jóvenes que concurren a los planteles oficiales de la zona rural, padecen, sobre todo, los rigores del abandono por parte del Gobierno y de la falta de condiciones para recibir una educación de calidad.
Problema de transporte
Alrededor de 560 niños de la zona rural de Arboletes tienen que desplazarse riesgosa e incómodamente en “carritos” que solo tiene capacidad para 10 pasajeros, pero a los cuales les suben o cuelgan hasta 30 niños, lo que representa un gran peligro para estos estudiantes que deben asistir a instituciones como Pajillal, La Candelaria, La Trinidad, El Carmelo, Santa Fe de las Plazas , entre otras.
El problema radica en que la administración municipal presuntamente no está cumpliendo el convenio celebrado con la administración departamental, en el sentido de garantizar el pago del 100% del valor de transporte a los niños de la zona rural durante el primer semestre de 2016 y el 50 % del costo de transporte en el segundo semestre; el otro porcentaje lo cubrirá la gobernación de Antioquia. En los actuales momentos el servicio lo presta gratuitamente pero con serias dificultades la empresa COINTUR, mientras se formalizan los contratos respectivos.
Por la forma de transporte este servicio es insuficiente, los niños no llegan ni salen a tiempo de sus casas a las instituciones educativas ni viceversa, lo que afecta la calidad de vida de los educandos y desestimula notoriamente a los niños y jóvenes que infructuosamente aspiran avanzar en sus conocimientos en condiciones dignas como lo establece la Constitución Nacional y la Ley.
Problema de infraestructura
Tal como se ha denunciado anteriormente la infraestructura de las instituciones educativas de la región de Urabá no escapan a las dificultades que afrontan otras de diferentes regiones de Antioquia y del país, pese a que el Ministerio de Educación quiere implementar a marcha acelerada la jornada única sin la existencia del mínimo de condiciones requeridas.
Las plantas físicas de más de cincuenta años de construidas requieren de reparación o de demolición y reemplazo inmediato hasta lograr seguridad y ambiente propicio para elevar la hoy cuestionada calidad de la educación en Antioquia, en otrora modelo para todo el país.
Falta de personal administrativo
No obstante haber recibido el 50% de los recursos del CONPES para la financiación de las principales actividades y necesidades de las instituciones educativas, estas no han podido ejecutar presupuesto por la falta de personal como tesoreros y secretarias. Aduce el Secretario de Educación de Antioquia, Dr. Néstor Restrepo, que han tenido dificultades al contratar con los operadores de los servicios administrativos pero poco a poco avanzan en el proceso de nombramientos y ya lo han hecho con 1.800 funcionarios.
Lo cierto es que en muchas instituciones educativas de Antioquia, entre ellas las rurales de Arboletes no tiene comunicación ni energía por la suspensión de servicios públicos por falta de pago al mismo estado, precisamente. Esto afecta indiscutiblemente la normalidad académica.
