El expresidente de Brasil, Luis Inácio Lula da Silva ganó la primera vuelta electoral. Cuatro puntos de diferencia logró sobre su rival, el actual mandatario, Jair Bolsonaro, en una elección donde la tendencia se revirtió a favor del candidato de izquierda cuando estaba 70 % de los votos escrutados.
Al final, con el 94,68 % del escrutinio, Lula obtuvo el 47,6 % con 53.291.296 votos y Jair Bosonaro 43,91 % con 49.153.393 votos.
Este resultado permitirá a los dos pasar a una segunda vuelta que se dirimirá el 30 de octubre.
Los números de todas las encuestadoras en las semanas previas cayeron ante el resultado final. Habían pronosticado una contundente victoria de Lula, que no se dio.
La elección fue mucho más polarizada de lo esperado, y el líder del Partido de los Trabajadores, presidente entre el 2003 y el 2011, tendrá que enfrentar nuevamente al actual mandatario, el ultraderechista Jair Bolsonaro.
Como era de esperarse, los otros candidatos tuvieron pobrísimos resultados, en los que el mejor fue el de Ciro Gomes, un socialdemócrata que repetía candidatura por cuarta vez.
Con las cifras de hoy, todo puede suceder dentro de cuatro semanas en una de las mayores democracias del mundo, que convocó a 156 millones de electores.
Bolsonaro, que votó en Río de Janeiro con un chaleco antibalas cubierto por la camiseta verdeamarilla de la selección de fútbol de Brasil, superó la expectativa de una derrota fenomenal, y Lula que lo hizo en San Bernardo del Campo, sonde se hizo el gran líder sindical de izquierda, logró una victoria más estrecha.
Doce años después de dejar el Palacio de Planalto, Lula busca regresar a la presidencia de Brasil y Bolsonaro, quedarse allí.