Néstor Ramírez, el gurú colombiano del barismo, es considerado un artista en el sector profesional del Café. Su trabajo, dedicación constante y su deseo por explorar nuevas posibilidades creativas alrededor del fruto más representativo del país y de otras regiones del continente, ha permitido dejar atrás el pasado violenta que dejaron las décadas de los 80 y 90 en el territorio nacional. No es para menos, Colombia es una nación cafetera y un símbolo a nivel mundial en la industria.
Hablar de Néstor Raúl Ramírez Rocha, es escarbar en la historia de un hombre que desde muy joven demostraría cualidades innatas para la creatividad, el servicio, el liderazgo y el arte. Nacido en Bogotá, hoy en día, el artista colombiano, ha logrado posicionarse como una de los bartender colombianos de mayor proyección internacional.
Sin embargo, para comprender la dimensión de lo que ha sido su carrera, es necesario remontarse a su adolescencia, cuando a los 15 años entraría a trabajar medio tiempo en una panadería de su barrio, cuyo salario lo invertía en su propio emprendimiento; circunstancias, quizás ajenas, para un joven de su edad, que serían los primeros pasos en el difícil camino de la libertad financiera.
Su paso por el Batallón de Infantería de Marina a los 18 años, resultaría definitivo. Allí, en la base ubicada en el Golfo de Morrosquillo, demostraría sus cualidades en administración y logística, las cuales le condescenderían la oportunidad de ascender rápidamente en una carrera militar promisoria que le permitiría recorrer el país. Recibió importantes condecoraciones por el excelente servicio ofrecido, tuvo a su cargo decenas de militares a quienes guio, lideró y acompañó durante los eventos de grandes dimensiones que se celebraban en las diferentes bases y a los cuales grandes personalidades, como el presidente de la República, hasta militares Internacionales que visitaban en país; celebraciones de suma importancia nacional. Así, Néstor, alcanzaría el rango de Suboficial Jefe.
Luego de una carrera militar destacada y gracias a su pasión por el “buen café”, decide dedicarse a la investigación y estudio de este gran tesoro ―escondido para ese entonces― y dar, de esta manera, una pequeña degustación alrededor del mundo. Su proceso de formación en este arte, lo llevó a prepararse con los mejores y le permitió explorar a profundidad el fascinante universo de este fruto. Es así como Néstor obtendría el aval para entrenar a baristas en alto nivel, compitiendo y ganando varios certámenes nacionales, los cuales le permitirían extender su huella y representar a Colombia en Latinoamérica.
En el 2008 decide emigrar a Ecuador con el propósito de hacer algo grande, país que lo recibiría con las partes abiertas, comenzando una nueva aventura en su vida profesional, en esta ocasión, en una de las expresiones artísticas más complejas y, quizás, menos comunes de la industria: el barismo, arte que le daría la oportunidad de transmitir todos sus conocimientos. Es en la nación vecina, donde el referente colombiano abriría una de las escuelas más distinguidas, la CIFEM Academy, preparando a cientos de profesionales que querían hacer del Barismo un camino.
Tiempo después, el artista colombiano, presentaría su primer libro, ‘Mitos y Verdades del café’, en el cual recogería sus aprendizajes; se abriría paso a nivel internacional y demostraría esa inquietud académica por formarse y expandir sus conocimientos buscando las academias más reconocidas en las que podría continuar con su formación.
«Ingresé al Speciality Coffee Association (SCA), en la cual me especialicé como Barista Skills, Barista Brewing intermedio y Roasting», explica Néstor Ramírez.
El barista colombiano, además, es Maestro del Taller de Barista y del Taller de Bartender, avalado por la Cámara Artesanal del Pichincha (CAP) de Ecuador; también, ha formado parte de diversas instituciones reconocidas a nivel internacional como la Zona Costa (Guayas), en la cual se desempeñó como director y de la International Bartender Asociation, en la cual ocupó el rol de trainer.
«En 2022 organicé la Organizador de la competencia Regional de Aeropress en el Guayas», agrega el artista.
Su carrera en el arte del barismo ha continuado buscando nuevos horizontes y otras posibilidades creativas. Su pasión, ha sido la estudiar e interpretar las múltiples técnicas que hacen del café un hito cultural del continente. Es un artista apasionado, comprometido y experimental que ha hecho del fruto más representativo de Colombia, Brasil y otros países de la región, una pasión que identifica a Latinoamérica.
En su segundo libro, ‘Café molecular: una experiencia comestible’, profundiza en las diferentes técnicas que explican cómo transforma una bebida del fruto en una textura comestible: falso caviar, falsos espaguetis, esferificaciones, entre otros; sin perder su verdadera esencia.
«Nace de la idea de proveer a los consumidores nuevas experiencias con el café. Es un gran aporte a los diferentes sectores alimenticios y conexos como son la gastronomía, cafeterías, pastelerías, bartenders y en términos generales a la cocina gourmet». Explica el artista, quien también es Máster del Café.
Durante su amplia carrera, ha demostrado ser un gran exponente del arte en mención, ha dedicado su vida a escribir libros y transmitir el mensaje de que es posible cambiar la imagen de todo un país, aprovechando sus beneficios.
