El Senador Uribe Vélez, opositor del proceso de Paz con las FARC, convocó a sus seguidores, en marzo pasado, a marchar contra la paz por las principales ciudades del país. En la ciudad de Bogotá, desde tempranas horas, se concentraron los activistas del Centro Democrático, partido de Uribe, vistiendo camisetas amarillas de la Selección Colombia, animados por las arengas antigubernamentales y en contra de las negociaciones de paz. “¡No más FARC!” gritaban por los altavoces. En medio de la marcha, vistiendo uniformes militares y mascaras antigases, según relatan testigos, en perfecta formación y actitud agresiva, los autodenominados “neonazis” concurrieron a la convocatoria uribista.
Sosteniendo un enorme pasacalle con la leyenda de la “Blood and Honour - División Colombia” del movimiento "neonazi", los cabeza rapada de sangre mestiza y criolla, durante el recorrido de la marcha, dieron rienda suelta a su enorme fobia por todo aquello que sea diferente: desprecian a los negros, odian a los judíos, persiguen homosexuales y lesbianas, asesinan drogadictos, hacen “limpieza social” golpeando y matando ladrones de barrio. En fin, en su ánimo exacerbado de pureza racial y mental, les causa molestia la pintura del mural callejero y las expresiones culturales populares de los nuevos tiempos urbanos. Después de los ritos de profilaxis social, usualmente, tranquilizan la conciencia en jornadas de procesiones con cantos a la Virgen.
Se autodenominan “neonazis”. Impúdicos, hacen alarde de sus preferencias ideológicas. Acechan a sus víctimas para “cascarles”. Se exhiben en marchas callejeras y eventos “políticos”, acompañados de políticos entre los que se cuentan la Senadora esposa del Presidente del gremio ganadero de FEDEGAN, el Concejal de Bogotá Marco Fidel Ramírez y el Procurador Ordoñez, entre otros. Con respaldo político los “neonazis”, alardean públicamente su existencia y no esconden a su organización armada, como el denominado “Batallón 88”, que actúa en barriadas en labores criminales de “limpieza social”.
¿Qué es una banda criminal? La investigadora Juliana Suárez Vanegas, nos dice que son aquellas “organizaciones criminales (macro – delincuenciales) significativamente armadas, que desarrollan actividades tanto de control de grandes negocios ilícitos como de depredación subsidiaria de los mismos, y que con frecuencia emplean la violencia como mecanismo de disciplinamiento interno, de delimitación de áreas de influencia específicas y de coacción e intimidación unilateral sobre terceros a fin de mantener las condiciones de operación requeridas por sus actividades”.
¿Poseen los autodenominados grupos neonazis las características que, según la investigadora del DEMIL define a las bandas criminales? Se conoce que los neonazis, por investigaciones periodísticas, han tenido y tienen vínculos con paramilitares, controlan negocios ilegales de tráfico de drogas ilícitas, prostitución y ejecutan acciones criminales de “limpieza social”. En extenso reportaje publicado por El Tiempo (18-05-14), bajo la firma de la Unidad Investigativa, se dice, a propósito del asesinato de exlíder de los neonazis de la “Tercera Fuerza”, que “Devia (asesinado) tuvo nexos con personas vinculadas al paramilitarismo. Además, se estableció que tenía indagaciones por porte ilegal de armas, lesiones personales, hurto agravado, estafa y violencia intrafamiliar” y que, además, “otras facciones neonazis, habrían recibido instrucción ideológica y fuertes sumas de dinero de un señalado paramilitar, cercano al extinto esmeraldero Víctor Carranza”. Además, según las mismas investigaciones mediáticas, se afirma que “el ala militar de la Tercera Fuerza, el líder asesinado trabajaba en una ´oficina de cobro´ al servicio de traficantes de droga en el sur de Bogotá, específicamente en la reconocida calle de ´Cuadra Picha´ en la Avenida Primero de Mayo” y sus nexos con las bandas del Bronx.” Personajes con nombres propios y sitios donde concurren estos grupos para sus borracheras intolerantes, son públicos.
Así pues, es claro que los neonazis, antes que organizaciones políticas, son la fachada en las que se recubren bandas criminales, como lo denuncié en saboteada intervención en el Concejo. Adicional, el coctel de las bandas criminales neonazis aliadas con políticos, con aparatos armados ligadas a las mafias, permeando instituciones estatales, como en el pretérito sucedió con el paramilitarismo, configuran el inaceptable proyecto de la “bacrimpolítica”. ¿Qué dice la Fiscalía?
