Con varias presuntas irregularidades de por medio, la Alcaldía de Medellín inició a última hora y justamente en el último mes de su gobierno, con improvisación y sin una compra de 105 predios que hay en el sector de la avenida Colombia con la 80, la obra que pretende ser un intercambio vial.
Inicialmente, la administración les comunicó a las personas que la obra comenzaría en julio de 2018 a través de la EDU (Empresa de Desarrollo Urbano) manifestando que los predios comprendidos entre la carrera 78a y la 81b los iban a necesitar. Resulta que después en enero 30 del 2019 decidieron que se necesitaba el costado norte, más adelante aseguraron que la obra iniciaría en julio del presente año, luego se anunció que en noviembre y actualmente apenas comenzó en el último mes del periodo de gobierno del alcalde, Federico Gutiérrez.
"Estos negocios que tienen que cerrarse parcial o totalmente, llegarán a la quiebra porque luego de ser reubicados pierden la clientela como ocurrió en Ayacucho y en la 30. Por donde pasa la EDU es un desastre y la historia de Medellín está plagada de eso. Calculamos que son aproximadamente 1000 personas en este sector de Colombia con 105 predios las afectadas. Hay cerca de 70 negocios: entre barberías, restaurantes, clínicas, empresas como Claro, floristerías, papelerías e incluso una iglesia cristiana" cuenta Jorge Virviescas, afectado por la obra.
En la avenida Colombia hay 105 predios afectados según la EDU (Empresa de Desarrollo Urbano) han entregado 97 avalúos, quedan pendientes 8 avalúos, hay 23 resoluciones notificadas, 13 aceptadas, 2 promesas de compraventa firmadas y 4 predios entregados. De lo cual, Julia Pertuz, quien es integrante de la comunidad, manifiesta que es falso porque a ella no le han entregado avalúo, así como a la mayoría de sus vecinos que aseveran que solo les llegaron las notificaciones de la construcción de la obra.
En la audiencia de la obra realizada el 10 de abril de 2019, se puede ver a los concejales cuestionando la obra, y al director de la EDU, Jorge Bermúdez. Los afectados no se consideran opositores de la obra ni del desarrollo, sino contradictores por la gestión y el avalúo de sus predios, ya que quieren salir en iguales mejores condiciones, en contraposición de lo que plantea la alcaldía que es un deprecio comercial de su bien inmueble que claramente afectará su patrimonio, su actividad económica y el tejido social. Por su parte, Bermúdez dijo que la EDU tenía 93 mil millones para comprar 105 predios en Colombia y 147 en San Juan para pagar indemnizaciones y compensaciones a todos los moradores.
“Perder una casa o un local, es un proceso en el que hay que elaborar un duelo así como pasa con estos territorios, el proceder de la EDU es llegar por delante con la palabra expropiación diciendo que si uno no acepta los avalúos de la Lonja, entonces expropian y le hacen a la gente un pago catastral. Un completo desconocimiento a los derechos de la ciudadanía”, asegura Virviescas.
Pese a que intentamos contactar a la Administración Municipal para contrastar la versión de los afectados, no obtuvimos respuesta por parte de los comunicadores de la EDU y de Planeación, que nos dijeron que luego nos iban a dar respuesta, pero la cual nunca llegó.
Los moradores esperaban información de la alcaldía de cuándo, cómo y de qué manera deberían salir, pero ya con las obras avanzando en sus narices se sienten en una pesadilla en pleno diciembre. No saben si surtir los negocios, si pintar las casas, lo único que les ha tocado hacer es resistencia a la manera de proceder de la alcaldía para lo cual han hecho plantones y marchas para que la ciudadanía se entere de lo que está ocurriendo con su patrimonio, cultivado en algunos casos hasta por medio siglo. Para una administración que dio caramelo implementando la política pública de moradores, demuestra con sus actos que sigue dando garrote a los propietarios de de la avenida Colombia en plena navidad.
