Continúa subiendo el costo de vida en el país. Para agosto del 2022 alcanzamos una inflación anual del 10,8 %, la más alta del siglo (si usted ganaba hace un año un millón de pesos, hoy gana menos de 900 mil en términos reales). De esa alza de precios hacen parte los servicios públicos y, en particular, la energía eléctrica que presenta un incremento del 25,9% a nivel nacional.
En Nariño, aunque menor, el incremento reportado por el Dane en la electricidad está por encima del 14 %, afectando a las miles de familias que demandan este servicio público para iluminación, actividades productivas, cocina (ante la falta de gas domiciliario), entre otros.
Sumado al alza, Nariño paga un alto precio por el kilovatio hora. Por ejemplo, mientras en Bogotá, una familia estrato tres tuvo que pagar en agosto por el kilovatio hora $670,03, en Pasto, a la misma familia le costó en promedio $785,26[1]. Una familia que vive en Pasto paga 17% más en su factura de energía eléctrica que una en Bogotá.
La mala calidad del servicio es otro padecimiento. Según el reporte realizado por la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios[2] sobre la calidad del servicio de energía eléctrica en Colombia, CEDENAR, la empresa encargada en Nariño, se ubica entre las peores, sólo por debajo del mercado de la costa Caribe.
La cantidad de horas promedio de interrupciones del servicio eléctrico en el país para el 2020 era de 31,49 horas, mientras que en Nariño era más del doble, 64,44. Si bien el indicador ha venido mejorando (en el 2019 era de 90,89 horas), dista de las tan solo 23 horas de interrupciones reportadas en el 2010 y de las menos de 2 horas en promedio que reportan países como Reino Unido, Alemania, Países Bajos o España.
Es responsabilidad social de los nariñenses poner la lupa sobre este tema y exigir a entidades públicas, organismos de control y la Empresa CEDENAR (99,9% propiedad de los Colombianos, con más de 500 mil usuarios y que reportó para el 2021 utilidades superiores a 18 mil millones de pesos[3]) que fortalezca la generación, distribución y comercialización de energía eléctrica en el Departamento. Mejorar las condiciones de vida de los nariñenses pasa por la capacidad de organizarse y movilizarse democráticamente para exigirle a esos funcionarios públicos (que viven de nuestros impuestos) que asuman su deber y trabajen por la región. Para eso se les paga.
Referencias
[1] Precio promedio del KWH del consumo de subsistencia que para zonas por encima de los 1.000m es de 130 KWH. [2] DIAGNÓSTICO DE LA CALIDAD DEL SERVICIO DE ENERGÍA ELÉCTRICA EN COLOMBIA 2020. Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios https://www.superservicios.gov.co/sites/default/files/inline-files/informe_2020_v2021-11-30%20%281%29.pdf [3] Informe de Gestión CEDENAR 2021. https://www.cedenar.com.co/wp-content/uploads/2022/05/INFORME%20DE%20GESTION%20CEDENAR%202021%20VERSION%20DIGITAL%20pdf.pdfTambién le puede interesar: