Lo dijo Carlos “El bananito” Betancur al programa radial español tumba abierta: él va al Tour para trabajarle a su ídolo, Alejandro Valverde. Aunque el ciclista murciano ha dicho una y otra vez que trabajará para Nairo, al final vamos a ver lo mismo que vimos en el 2015: a Unzúe le importa más ganar la clasificación por equipos que la General Individual. Para él es más importante ver en el podio a sus dos bazas y no a Nairo paseandose orondo vestido de amarillo por los Campos Elíseos. Si en el Sky Geraint Thomas y Sergio Luis Henao no disputan en ningún momento el liderazgo de Froome, si en el Trek Bauke Moullema y Jarlinson Pantano la tienen clara de que en carretera no se da un pedalazo de mas sin el consentimiento de Alberto Contador, en el BMC tampoco nadie discute la supremacía de Richie Porte, en cambio, en Movistar una vez más no se va a saber quién es el líder.
Alejandro Valverde es un super corredor, un tipo que adora a Nairo y le ha dado la mano cuantas veces ha podido. Es de aplaudir que un clasicómano como él, uno de los diez mejores ciclistas que ha tenido España en toda su historia, trabaje para un joven de 27 años que de paso es uno de los tres mejores corredores del mundo. El problema no es Valverde, el problema volverá a ser la estrategia del equipo que apostará por los dos. Con Movistar dividido y la máquina del Sky trabajando perfectamente sincronizada, Froome podrá ganar su cuarto tour con todo y los problemas de espalda que ha cargado esta temporada.
Además aún no sabemos como llega Nairo. Tiene encima 4.000 kilómetros de competencia, el doble de lo que trae Contador y el triple de lo que ha corrido Froome y Porte, sus más enconados rivales. El Giro, no sé para que nos metemos mentiras, lo hizo a tope y no alcanzó. Ojalá se cumpla lo que ha dicho Unzúe y lo que el mismo boyacense nos ha demostrado: que él hace mejores segundas vueltas que primera, que su organismo es capaz de asimilar los más punzantes dolores y que en el Tour nos encontraremos con el Nairo capaz de sacar las diferencias necesarias en un Tour además anémico en montaña y que tendrá dos contrarrelojes ideales para Froome y Porte.
En la carretera cada cual ocupará su lugar. Ojalá Unzúe se decida por uno de los dos. Lo que ha demostrado la historia es que con dos líderes no se gana ninguna carrera. En el 2012 Bradley Wiggins ganó gracias a la ayuda inestimable de Froome. Ojalá podamos decir este año del trabajo de Valverde para con Nairo
