Más de cuatro decenas de familias de personas dadas por desaparecidas entre la década de los noventa y el año 2000, decidieron unirse para crear la Asociación en Memoria y Dignidad de los Ausentes en el Cesar –AMDAC-, primera organización de víctimas de desaparición forzada en el departamento.
Luego de tres años de trabajo colectivo –incluso en medio de la pandemia-, a finales del año 2021 lograron formalizarse y hoy acompañan al menos 42 casos de desaparición forzada en el marco del conflicto armado colombiano, concentrados temporalmente en los momentos de consolidación y auge del paramilitarismo en la región. Por lo mismo, gran parte de las buscadoras y buscadores son personas de la tercera edad, llevan más de veinte años tratando de dar con el paradero de sus seres queridos.
El objetivo de la asociación es acompañar y construir una red de apoyo par a los familiares de las personas dadas por desaparecidas en la ruta de búsqueda, así como proporcionar herramientas jurídicas y técnicas que les permitan encontrar a sus seres queridos.
Las familias que hacen parte de AMDAC son, en su mayoría, de los municipios pertenecientes a lo que se conoce como el corredor minero del Cesar: Agustín Codazzi, Becerril, Chiriguaná, La Jagua de Ibirico y otros en los que hubo presencia de las Autodefensas de Córdoba y Urabá, especialmente del frente Juan Andrés Álvarez.
“Para mí AMDAC ha sido importante porque es pasar de un trasegar solo a encontrarse con un grupo de personas en la misma situación que uno. Es sentirse acompañado. Encontrar así sea un cabello o un diente es un avance, uno guarda la esperanza. Si encontráramos a nuestros familiares podríamos descansas y tener paz”, manifiesta Rafael Palmera, quien busca a su padre que fue desaparecido en El Copey.
Los casos documentados por la asociación están relacionados con la actividad política y social de las personas dadas por desaparecidas. Las víctimas eran líderes comunitarios, campesinos activos políticamente y/o parceleros cuyas tierras revestían un interés particular para algunos actores económicos de la zona.
La asociación ha permitido a las familias afianzar los lazos de amistad y confianza, así como encontrarse en la búsqueda colectiva, que es fundamental en estos procesos. Así mismo, visibilizar un fenómeno poco documentado en el departamento y participar activamente en los planes de búsqueda regionales.
“Queremos llegar a otras víctimas de desaparición. Juntos podemos acompañarnos en la ruta de búsqueda y no desfallecer en los momentos difíciles. En AMDAC somos una familia y todos estamos para todos”: Kelly Díaz, buscadora.
Según el trabajo de desapariciónforzada.com hay más de nueve mil personas desaparecidas en el departamento, muy por encima de las cifras proporcionadas por las instituciones colombianas: hay un subregistro del fenómeno en el Cesar.
AMDAC nace en el marco de las actividades realizadas por PAX y la Asamblea Campesina del Cesar por la Restitución de Tierras y Buen Vivir –ACCRTBV-, a propósito de un proyecto encaminado a abordar la desaparición forzada como un fenómeno relevante en el departamento del Cesar. En principio, se focalizó en casos relacionados directamente con despojo de tierras, pero gracias al trabajo comunitario e interacción con las víctimas se logró hacer una identificación general de casos por comunidad.