Con una majestuosa marcha por las principales calles del municipio de montería se encendió la llama de la educación que ilumino de esperanza los corazones de las personas que en la noche del jueves 30 de abril observaban con detenimiento como los educadores de esta región del país, una vez más se movilizaban con el único propósito de demostrarle a la comunidad la lucha en la que se encuentra el magisterio Colombiano para que el gobierno nacional entienda que debe garantizar una educación Pública y universal a todos los niños y niñas de nuestro hermoso país.
Como en un típico 8 de diciembre cuando las velas se encienden, cientos de docentes, estudiantes y padres de familia, quienes masivamente asistieron a este llamado, llevaban en sus manos faroles encendidos con la luz de la esperanza educativa y con ella, le enseñaban al público que los maestros, esos que con amor le enseñan a sus hijos a ser hombres de bien, aun tienen fe y esperanza que la educación de este país puede ser aun mejor y para eso, la Ministra de Educación Gina Parody, debe dejar la soberbia y comprometerse a dialogar con el gremio de los maestros para establecer la ruta que permitiera el levantamiento del Paro Nacional indefinido que inicio el 22 de abril y que tiene a mas de 8 millones de niños y niñas sin poder ir a las escuelas.
Niños de todas las edades en representación de sus Instituciones Educativas, sin lugar a dudas, fueron los grandes protagonistas de esta multitudinaria caminata quienes en compañía de sus padres y hermanos, le mostraban a Montería que aun con la inocencia que los caracteriza, están sumados a esta lucha que hoy tiene manifestando a sus profesores para mejorar la calidad de la educación que ellos reciben.
El apoyo al gesto de los maestros de montería no se hizo esperar pues durante el recorrido recibían palabras de agradecimiento, voces de lucha y aplausos de admiración por parte de la comunidad monteriana que con gran entusiasmo y alegría observaba como en medio de la oscuridad se alzaban las luces de los faroles que simbolizaron la luz de la esperanza educativa del país. Muchos padres y madres de familia de las diferentes instituciones educativas de la ciudad les daban una cálida bienvenida con aplausos a quienes en las aulas de clase representan y simbolizan la grandeza de un ser humano quien la vida lo apremia con la oportunidad de guiar a sus hijos quienes serán el futuro de Colombia.
La llama que hoy se encendió de ninguna manera se apagara con la culminación de esta hermosa caminata por la ciudad de Montería, si no que por el contrario, permanecerá encendida en los corazones de cauda uno de quienes en realidad comprende que la lucha de los maestros es la lucha de un pueblo que busca mejorar las condiciones de una labor que debe ser valorada por todos.
