El arzobispo de Villavicencio y presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana, monseñor Óscar Urbina, la cabeza de los obispos de Colombia, fue internado en la unidad de cuidados intermedios de la clínica Servimédicos de Villavicencio.
Monseñor Urbina, oriundo de Arboledas, Norte de Santander, y quien también fue obispo de la Diócesis de Cúcuta, presentó complicaciones médicas desde el día de ayer, a causa de un cuadro respiratorio.
El arzobispo de la Arquidiócesis de Villavicencio, cercano al papa Francisco, una las fichas clave para traer al máximo jerarca de la iglesia católica al país y fue quien lideró la organización de la visita en septiembre de 2017.