En medio de la entrega de los nuevos puentes de abordaje del remodelado aeropuerto Cortizzos, la ministra de Transporte Angela María Orozco se vino con todo contra la firma holandesa Boskalis.
La Jefe de esta cartera manifestó su disgusto por la forma en que está empresa, a la que el gobierno nacional le dio el sí para la oferta del dragado del canal de acceso al puerto de Barranquilla, se retractó con explicaciones livianas, dejando al puerto con una operación restringida este fin de año y varias semanas del próximo .
Según lo explicó Cormagdalena en medio de la urgencia llegaron tres ofertas para dragar el canal, se seleccionó a esta firma holandesa por las condiciones expuestas para el negocio, se adelantaron reuniones, se aceptaron las exigencias de la compañía, entre las que estaba suspender un contrato con una draga que estaba en servicio y dos horas después del cierre de la negociación se retractaron, según lo conoció Las2Orillas con argumentos tan particulares como “Nos vamos de vacaciones y no hay quien firme las pólizas”
Orozco, que además es barranquillera, anunció hoy que solicitó a la superintendencia de Industria y Comercio que investigue lo sucedido con esta firma holandesa que con su actitud logró que no se adelantaran negociaciones con otras compañías, entre ellas una mejicana dejando la operación portuaria de la ciudad a merced del sedimento que impide que lleguen barcos a través del canal del río .
El tema es de un ”profundo calado” porque la situación obligó a declarar una urgencia manifiesta que como figura jurídica posibilita la contratación sin licitación .
Barranquilla, que es distrito industrial y portuario ve como periódicamente el sedimento que trae el río Magdalena impide que barcos cargados o por cargar naveguen hasta los puertos que están ubicados aguas arriba de Bocas de Ceniza y hagan su operación comercial, obligando a desviar la carga a Cartagena o Santa Marta con la evidente pérdida de productividad para la ciudad.
Orozco manifestó que Barranquilla debe tener una draga propia para evitar que “los privados se aprovechen de esta situación” y hagan su agosto con las condiciones naturales de una infraestructura que pide a gritos un puerto de aguas profundas que debería estar ubicado costa afuera, aspiración frustrada por la actitud de algunos empresarios en Barranquilla que históricamente se han manifestado en contra de esta solución definitiva al problema de una ciudad con puerto pero sin barcos .
Por lo pronto y con los fuertes vientos de diciembre la situación empeora. Solo en dos semanas podría verse una solución al dragado, por ahora hay que empezar de cero el proceso de contratación