Francisco González se enteró de la desaparición de su pueblo Armero por la radio. Era el 13 de noviembre de 1985 cuando la voz de Yamid Amat anunció la avalancha que se llevó a toda su familia -le quedaron solo dos hermanos- junto a los 4000 armeritas. Después de los funerales se destapó una nueva tragedia. La desaparición de 464 niños que quedaron vivos. Francisco González, con su fundación Armando Armero, ha logrado el reencuentro de cuatro de ellos, pero los sigue buscando como cuenta aquí.
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