"Tranquilo, que todo el mundo come marrano mientras aprobamos leyes sin que la gleba se haya dado cuenta, carachas".
A pupitrazo limpio, nos saneamos cual Divino Niño.
Hubo tres proyectos de ley que en fila india fueron aprobados, sin que los medios hablaran de ello y ni siquiera se abriesen al público. ¿Trampa electoral? ¿Quién sabe? Sabrá Mandrake.
Lo cierto es que nos embutieron estos proyectos de ley, imponiendo una práctica de un monopolio sin precedentes, beneficiando a unos pocos que con chequera en mano nos quieren dar a entender que sin ellos el país no puede salir adelante.
Ley de capacidad jurídica
Lo lograron con la excusa de tercero de primaria de que "la Onu necesita que los países garantes eliminen la interdicción como una forma de suprimir toda discriminación por razón de discapacidad". Y está bien que se haga, pero hay un problema: que únicamente beneficia a un solo grupo de discapacidad (en este caso, las personas con síndrome de Down), perdiendo toda razón de un modelo objetivo, transparente e idóneo y descuidando la jurisprudencia y creando vacíos que van a repercutir en el no reconocimiento de igualdad de derechos a personas con discapacidad sensorial, física, mental y múltiple.
Ley de convergencia para las TIC
Si esto no fue suficiente, ahora quieren dar más beneficios, si cabe, a los medios privados del país como Caracol y RCN, más la insistencia de un godo como Vargas Lleras que a cualquier costo, y siendo dirigente de Cambio Radical, quiere regular el uso del internet, para que el pueblo tenga menos acceso a medios alternativos.
¿Acabar la televisión pública? Qué manera tan divina de decir que lo público es un asco, ¿cierto, señor presidente?
Para más dolor, cada vez son más lo hechos que demuestran que es mejor quedarse callado que salir a opinar en contra de los poderosos. Este es un mal mensaje a la sociedad, que además afecta a las expresiones culturales, de pensamiento crítico y analítico, que quieren ser saboteadas.
Todo esto es para que el Estado quede en manos de burros, que hagan lo que les venga en gana sin resistencia alguna. ¿No dizque no seríamos una segunda Venezuela? ¡Quien las hace las imagina!
Ley del deporte paralímpico
Este es un remedo de ley que pretende imponer a la fuerza los deportes para las personas en silla de ruedas. ¿A eso llegó usted a la Consejería de Discapacidad, señor Clopatofsky?
Desconocer deportes como el fútbol de salón para ciegos, goalball, fútbol 5, ajedrez inclusivo, ciclismo, patinaje, entre otras disciplinas que practican personas ciegas, sordas, etc, deja muy mal parada la imagen de Colombia ante organizaciones internacionales sobre la idoneidad en garantía de DDHH y equiparación de oportunidades.
Sus 100 días poco han prosperado, señor consejero. Muchas promesas, talleres de aquí y allá sin resultado visible, ausencia total en debates públicos de interés general y una desorientación terrible respecto a los temas de inclusión.
Si Iván Duque tiene el carro estrellado (como lo relata la caricatura de Matador), usted sí que tiene el barco de la inclusión a punto de chocar contra un iceberg.