Valentina González Medina, una joven barranquillera de 21 años, hija de Margarita Blanco, rectora del IED El Silencio, y de Álvaro González, empleado de Transmetro, estudiaba octavo semestre de Psicología en la Universidad del Norte, en la capital del Atlántico, y realizaba sus prácticas en Valledupar, pero decidió descansar con sus amigos en las playas de Barú, cerca de Cartagena, este sábado.
González Medina y sus amigos alquilaron una lancha y anclaron en un sector conocido como Tierra Firme, en la Isla Cholón. La joven decidió aprovechar el lugar para disfrutar de una actividad que practicaba de manera aficionada: caretear, o, mejor dicho, nadar mientras observa los peces y otros animales marinos desde la superficie, con una careta de buceo, lo que permite disfrutar del paisaje marino de una manera más sencilla y menos exigente que bucear.
Mientras ella careteaba, se sumergió en el mar y justo en ese momento pasó un yate a alta velocidad, golpeando a la joven y causándole heridas mortales con la hélice del motor. Inmediatamente, la joven fue llevada a la orilla por sus amigos y unos lancheros que estaban en el lugar. Luego de dar aviso a las autoridades y realizarse el levantamiento del cadaver, se supo que las heridas le causaron la muerte de forma inmediata. El cuerpo fue llevado a Medicina Legal para que sus familiares lo reclamen.
El conductor del yate que causó el accidente, identificado como José Gertrudis Palencia Quintana, fue detenido en la tarde del domingo y lo llevaron ante la Fiscalía, que este lunes en la mañana decidió dejarlo en libertad, debido a que se consideró un homicidio culposo sin agravantes. De hecho, las normas internacionales, que dio a conocer Parques Nacionales y Guardacostas, indican que las personas que practican careteo deben poner señalizaciones para evitar accidentes como el de González Medina quien, según parece, incumplió esa norma.
Me conmueve la prematura partida de
Valentina González Medina en Cholón. Mi abrazo solidario para toda su familia, en especial a su abuela, mi querida amiga Margarita Blanco, rectora de la IED El Silencio, y a Álvaro su papá, de nuestro equipo @transmetrobaq. Descansa en Paz.— Alejandro Char (@AlejandroChar) December 1, 2019