Hace algunos días el presidente Petro y la alcaldesa López se atrevieron a mencionar que Bogotá es una de las ciudades más seguras de Colombia, basados en las estadísticas dicientes de reducción de algunos delitos.
Sin embargo, cuando miramos el día a día de los ciudadanos de a pie estos son asesinados, asaltados, extorsionados, desplazados, secuestrados, y ahora aparece en el panorama algo que no era normal ver en nuestra ciudad, cadáveres en bolsas dejados en sitios como advertencia, para otros grupos que se dedican al negocio del micro-tráfico, y que emplean esta siniestra forma de enviar mensajes a sus grupos rivales para obligarlos a dejar sus territorios en los que se realizan los negocios ilegales.
De acuerdo a un reportaje presentado por "Noticias Uno" hace algunas horas, son cerca de 20 bandas las que están dedicadas a los negocios ilícitos en la ciudad, son al menos 17 localidades las que están afectadas por las operaciones ilegales de estos grupos y que están afectando la seguridad ciudadana.
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Lo único que hace la alcaldesa es enviar mensajes por redes sociales en la que señala sus "grandes logros", pero que no impactan de manera positiva a los ciudadanos de Bogotá, ya que diariamente estamos expuestos al asedio de lo criminales, malandros, ladrones, narcotraficantes y asesinos que nos esperan en las esquinas para hurtar nuestras pertenencias, pero también para acabar con nuestras vidas.
Es frustrante salir a la calle y no sentirse seguro en ningún entorno, nos asaltan en el transporte público, nos roban cuando departimos con nuestras familias en un restaurante, nos hurtan nuestras bicicletas cuando salimos a hacer deporte, nos asesinan cuando retiramos plata de los bancos para poder hacer negocios.
Es imposible vivir en una ciudad "que no tiene un mandatario" que sepa gobernar y que centre su atención en los CIUDADANOS y no solo en su carrera política.
Sí lo que busca es ser un referente para lograr ser la presidenta del país, usando como trampolín la Alcaldía de Bogotá; muchos estamos seguros que no lo logrará, ya que el insumo más importante son los votos de los ciudadanos que premian una buena gestión y por lo menos en seguridad ciudadana, la alcaldesa López deja mucho que desear.
La seguridad ciudadana en Bogotá no tiene norte, son solo bandazos para tapar los problemas que surgen, pero no hay una estrategia clara y definida para entender la situación y diseñar un plan de acción que nos saque de este agujero en el que López nos ha metido, porque se dedica más a posar para los medios y para vender sueños, que para resolver los graves problemas de la ciudad.