Respecto al vídeo publicado hace pocos días, en el cual un hombre de raza negra se queja ante unos policías, ha causado controversia y debate respecto al racismo y, sobretodo, a la observación del otro en la cotidianidad y su representación en los medios.
Es evidente que los medios juegan un papel fundamental en la creación y percepción del mundo. Además de teoría comunicativa, esto es importante, pues, nos invita a pensar ¿cómo nuestros medios están representando ese mundo? y ¿cómo lo estamos mirando nosotros? Es preocupante que muchos de los argumentos que utiliza este hombre en su defensa sean válidos: además de tener una retórica muy buena, es triste lo que está ocurriendo en el imaginario colectivo.
"Mi prisa sí es sospechosa porque soy negro, pero la de ellos no porque son blancos", frases de este tipo son fuertes pero ciertas. Inclusive, al fondo del audio se escuchan personas que lo afirman. ¿En nuestro imaginario todavía es sospechoso una persona de raza negra? Hay que pensar en este tipo de actos. Si bien, la policía sólo hacía su trabajo y es aceptable, sin embargo, ¿cómo estamos mirando al otro?
Hay que pensar y reflexionar cómo estamos viendo al otro,a esa persona distinta a nosotros. Pero aún más, cómo los medios nos están mostrando al otro: al homosexual, al negro, al blanco, al extranjero, etc. Ante la ley todos somos iguales, lo importante, es que esa ley no se queden en papel mojado como nos dice el hombre en el vídeo.
Esta ocurrencia nos sirve para pensar entonces en la convivencia colectiva. ¿Somos capaces de convivir en una ciudad tan diversa como Bogotá? Si queremos que nos respeten, debemos respetar a los demás, respetar la diferencia y proteger la cultura. Si queremos un país en paz, una ciudad más cívica y habitable, tenemos que empezar a aportar esas facultades desde nosotros mismos.
