¿Chocoanos pobres?, ¿quién dijo? Piden a gritos ser escuchados, pero les matan sus líderes…
En Bahía Solano, la más bella playa de Colombia, simplemente no quieren un puerto.
Ahora bien, a pesar de una participación de medio punto en el PIB del país, el Chocó es el único departamento bañado por la riqueza de dos océanos y el único fronterizo al istmo panameño. Sin embargo, sobrevive luchando contra el olvido patrio, ahogado y sin vías de comunicación con el interior del país y hasta con Panamá.
Además del potencial turístico, tiene en su inventario la mayor llave de agua en los cielos del mundo, con un promedio anual de 9.000 mm, regando su territorio con dieciséis ríos que conectan los dos océanos del valioso líquido.
Así mismo, se carga con el orgulloso primer lugar de “asentamiento español en territorio colombiano”, con la fundación de Santa María la Antigua del Darién, por allá en 1510, hoy abandonada en su historia (solo quedan algunas ruinas que se pueden rescatar)... ciudad que se encuentra cerca de Capurganá, muy al norte caribeño, en el municipio de Acandi, nido de las famosas tortugas de carey.
Los chocoanos dueños de la mitad del litoral Pacífico tienen un nacedero y al mismo tiempo un rincón para la luna de miel de las ballenas jorobadas (yubartas) en Nuqui (en la hermosa Bahía Solano, desde julio), justo donde algunos capitalistas hoy piensan contaminar con ACPM, y con un puerto para grandes buques que terminaría con el coral y la biodiversidad pesquera.
Por el otro lado, arriba en el Atlántico en límites con Panamá (más exactamente en Capurganá), el Chocó tiene muchos nidos de un cuadrúpedo reptil, la tortuga carey (testigo de dinosaurios), ovíparo que se turna cada 3 años y durante 10 meses para desovar un promedio de 150 huevos por hembra, en su territorio de 13.500 hectáreas que les fue titulado por el departamento desde el 2005 (estas carey son algo así como las controladoras de esponjas y erizos para la salud de los corales, moluscos y crustáceos marinos).
Qué machera… Qué riqueza tenemos con el Chocó. Perdonen, pero debe ser un bello espectáculo con la naturaleza vivir esa experiencia al norte del Golfo en linderos con Panamá.
Mineria. Chocó es considerado como la capital mundial del platino, aunque también se explota el cobre, oro y plata, por lo cual los españoles trajeron esclavos africanos, origen del actual mestizaje (80% de su población es afrocolombiana).
La palabra “choque” es un vocablo de la “cultura aimara” que significa oro, tal vez de ahí su nombre… imponiéndose como una de las regiones más biodiversas del mundo y con bailes como la chirimia y artesanos de las mejores marimbas de chonta, hechas con la caña del chontaduro
Aunque la pesca fluvial es de un gran potencial y la pesca marítima ni se diga como fuente de empleo y alimentación humana, tristemente es desaprovechada por el gobierno nacional.
Maderables. Aunque se explota este potencial del Chocó de manera clandestina e irracional, se hacen esfuerzos por reforestar con un hermoso árbol de color blanco y envidiables betas buscadas por los mejores ebanistas. “La paulownia” (de origen chino), madera muy útil para todo.
Como un buen proyecto en tan solo 5 años de siembra, con este árbol (la paulownia) se podrían obtienen ingresos por $130 millones por hectárea, con una inversión de apenas 20 millones. El producto final sería un árbol de 28 metros (y casi 60 cm de diámetro) rentablemente maderable, que bien puede competir con nuestra flor morado colombiano y que, junto al silvestre cedro macho en el Chocó, podríamos preservar para reforestar con especies no nativas, como el hermoso ébano africano y la invaluable teca de la india, porque trabajo si hay…
El Chocó es muy rico y además cuna de un expresidente y de una reina de Belleza.
Recordemos que allí nació Isabel Ibargüen… y el actor Óscar Borda…
También María Isabel Urrutia campeona Olímpica de pesas… El Chocó es la casa de otros 5 medallista de talla olímpica.
Pero el broche de oro se lo lleva (por la actualidad) el nombramiento por la Nasa de Hamilton Mosquera experto en drones, quien será responsable de manejar virtualmente estos aparatos en Marte para el 2021.
Hamilton, un joven de treinta años, manejará una especie de helicóptero, el Ingenuity, que será el que sirva para planificar desde la tierra, la mejor ruta para el desplazamiento del explorador Perseverance (versión mejorada del Curiosity y de otras sondas de los árabes y la Agencia Espacial Europea que lo precedieron).
A propósito, dos meses después que el Perseverance haya “amartizado”, lo harán los chinos, que en estos momentos de diciembre de 2020 van en camino a Marte. Qué machera tanta información científica que nos depara el año 2021… Snif…
Ahora es cuando debemos quitarnos el sombrero ante los avances de la inteligencia artificial, que desde ya parece tomar sus propias decisiones (pregunto, ¿podríamos decir que esta sonda tiene capacidad de razonar y pensar?).
Una vez que la sonda entre en la atmosfera marciana tiene que “pensar” y hacer cálculos ella misma sin ningún tipo de ayuda (no se puede equivocar, pues no podemos ayudarle en el aterrizaje) … Juemadre. A cruzar los dedos.
Pero, en resumen, buena esa por lo que le corresponde a los colombianos. Lo digo en plural porque también estará en la Nasa otra científica colombiana, Diana Trujillo, que lideró la operación del Curiosity en su momento.
Wow, ¿un robot con razonamiento?
Y lo digo porque es apenas comprensible el hecho de pensar que esta sonda tiene que resolver ella misma y por sí sola problemas inmediatos sin esperar 16 minutos una respuesta. Pues podría costarle la vida… ¿o la muerte?
En resumen y volviendo al tema, podemos entre todos hacer del Chocó y su gente el sector más rico de Colombia. ¿Saben cómo?
Con la venia y el permiso de ese medio millón de chocoanos podríamos avanzar en el desarrollo departamental… con proyectos de trabajo y diálogo concertado y coordinado con sus verdaderos dueños, para riqueza del pueblo afrocolombiano, pero sin puerto contaminante.
Trabajo sí hay y mucho por hacer… Reciban este resumen como la introducción a lo que podríamos proponer para desarrollar ese bello departamento, pero con una condición…
Respetando su playa, su bosque y su manglar (nido de muchas especies) y respetando toda su biodiversidad, base de un futuro alimentario y turístico, para riqueza chocoana.
Uf, que machera… trabajo chocoano en Marte, ¿cómo la ven…?
“Todo el mundo puede dudar de usted, menos usted”, Hamilton Mosquera.