Desde el año 2009 el municipio de Tópaga, Boyacá ha venido presenciando la invasión de personas de otros departamentos del país, estas llegaron al municipio en busca de trabajo minero, siendo la minería una de las mayores fuentes de trabajo y de ingresos para sus habitantes, estas personas han traído consigo sustancias alucinógenas, las cuales se han venido implantando en el municipio.
Han pasado 6 años y el problema se ha venido incrementado, la juventud topagüense es la más afecta, tenemos un porcentaje entre 60 y 70% de jóvenes entre las edades de 10 y 20 años que se encuentran en la drogadicción, personas que en las drogas encontraron el facilismo para su vida cotidiana. Tenemos niños entre las edades de 10 y 13 años quienes son los que transportan las sustancias psicoactivas, ¿Quién podría sospechar de un inocente y pequeño niño?, estas personas han estado burlado a las autoridades del municipio y no solo ellas, también a cada uno de los habitantes.
Pero, hay alguien a quien le interese la niñez y juventud Topagüense ¿Qué han hecho las autoridades frente a este problema?, ¿Por qué nuestra administración no actúa frente a la situación?, nuestro municipio carece de autoridades, nuestra administración está más atenta a su política e interés económico.
Soy joven y soy topagüense a mucho honor, pero amaba más a mi pueblo cuando era una tierra, inocente ante una problemática como lo es la drogadicción , éramos el pueblo que trabajaba por su familia y su bienestar, hoy año 2016 un joven trabaja para poder conseguir droga y somos pocos los jóvenes que luchamos contra este problema para hacer una mejor sociedad, ya que los jóvenes somos el presente y el futuro de nuestro país y en nuestras manos está la responsabilidad de hacer de este un país mejor.