Mucho se ha hablado de la mala información que ronda las redes sociales, las fake news, la rapidez con la que hoy nos lanzamos en ristre sobre algún tema y mañana ya queda solamente en recuerdos porque llega uno nuevo cada día como resultado de la viralización cibernética. Sin embargo, existe también la otra cara, la que desea comunicar temas para el buen vivir y que son aplaudidos por miles de seguidores.
Es el caso de los vídeos cortos, en la mayoría de ellos, patrocinados por marcas privadas como Aprendamos juntos de BBVA, Hablan los expertos de Semana o los realizados por la Revista Dinero, a los que son invitados personajes líderes de diferentes sectores (cultural, político, empresarial, económico, etcétera) para que cuenten abiertamente sus historias de vida o anécdotas de cómo han logrado salir adelante, subir su autoestima, triunfar y ser ejemplo para la humanidad.
Construir para redes sociales mensajes dignos, educativos y positivos requiere de un esfuerzo y andamiaje, pero está visto que bien vale la pena, especialmente para un mundo que vive cada vez más rápido y que se dedicó solamente a tener cuentas personales donde solo importan los views, likes, suscriptores o seguidores.
Marcar la diferencia positivamente en las RRSS es todo un reto, un propósito de los comunicadores de avanzada, que con disciplina, creatividad e innovación realizan formatos rápidos de videos, basados en hechos reales, que en todo caso son de alto impacto, que dan gusto verlos y se quedan en el imaginario colectivo, porque la comunicación oral sigue siendo el mejor ejercicio para aprender rápidamente.
En la otra cara de la moneda, hay quienes dicen que se debe tener especial cuidado con los contenidos de este tipo de vídeos, pues no faltan quienes se quieren aprovechar de los más vulnerables, enviando mensajes errados de tipo social, cultural o fanatismo religioso, para llevar como verdad algo que solo persigue un interés propio y por tal razón se deben encender las alarmas y determinar si el mensaje es certero y óptimo para su vida y no oportunista.
Es importante que se sigan gestando más ideas de comunicación de alto impacto, en formatos que nos permitan seguir creciendo, haciendo un pare en el camino, contribuyendo a alcanzar la felicidad, la armonía social y realización personal.
Está claro, el mundo necesita más personas ejemplos de vida que nos permitan ver el horizonte con optimismo, que guíen y recomienden la mejor forma de vencer obstáculos a través de experiencias propias. Y si usted es uno de ellos, ¿por qué no se atreve a ponerse a la moda, con su celular a prueba y contar su propia historia? Seguramente nos daremos cuenta que todos tenemos algo que enseñar, que puede marcar la diferencia, que debemos comprometernos a llevar semillas de felicidad, como quien dice: “La comunicación al servicio de la sabiduría”.