Medios (y fines) de transporte

Medios (y fines) de transporte

Es necesario propiciar una adecuada cultura ciudadana y activar incentivos que pongan fin a los vehículos que tradicionalmente dominaron el siglo pasado

Por: Germán Vargas G.
junio 01, 2020
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.
Medios (y fines) de transporte
Foto: Leonel Cordero

El tándem CD, Claudia/Duque, maneja al país y la capital hacia el pasado, y los indicadores retroceden hacia la previa de la era Uribe, la crisis financiera de 1999, e inclusive la constituyente de 1991.

El presidente cree que solo 19,8% de los colombianos son atenidos (Dane, 29/5/2020) y la alcaldesa que, en el peor de los casos, apenas 22% estará cesante. Tras tantos pasos en falso, Polonio les aconsejaría que dejaran de ser falsos (Hamlet, acto I, escena 8), pues sus actos de gobierno determinan la extinción de la clase media y la corrupción de los medios de vida (y transporte).

Bogotá Solidaria pretendió sustituir al ineficiente Estatuto Tributario y su logística demostró ineficacia ante la pobreza oculta. También defraudaron las demás medidas de aislamiento, pues el régimen laboral es el rebusque, aunque Claudia diga que sin ella “estaríamos como NY”: peligrosa declaración en un entorno tan pobre como arribista/esnobista.

Para rematar, exacerban el egoísmo y la corrupción, la inequidad e insostenibilidad, otorgando incentivos a los infractores (Decreto 678, 20/5/2020); liberando el pico y placa, aunque la costumbre sea usar el carro hasta para comprar pan; demostrando indiferencia con los espacios públicos o de tracción humana, invadidos por las apps; respaldando la anacrónica “alianza estratégica multimodal” propuesta por el transporte privado; y hasta improvisando la constitución de un operador público de transporte masivo, cuya propuesta empezó como la de las basuras de Petro.

Según la Encuesta de Movilidad (2019), promediando los estratos 4-6, 49% de sus habitantes tenía automotor, y 31% bicicleta; hasta 46% de los viajes se realizaba en el propio automotor, y 18% mediante apps. Contrasta el segmento restante, donde la propiedad se reduce al 15% y 17%, respectivamente, y predominan caminar (32%) o TransMilenio (24%). En el global, menos del 7% del total de viajes se realizaban en "caballitos de acero", y su hurto sigue siendo uno de los huevitos que deshonró el presidente que se hizo elegir con las banderas de la seguridad democrática (Informe de Calidad de Vida, 2019).

Considerando las distancias y tiempos de desplazamiento, el tráfico —con y sin pandemia—, y el cambio climático, "esperaba" medidas innovadoras desde la líder de la Alianza Verde, aunque 87% de los habitantes desestimara la bicicleta como alternativa, según la Encuesta de Percepción Ciudadana (Bogotá Cómo Vamos, 2019).

Muy pobre su nuevo contrato social. Jugando a la prospección pospandemia, imagine que el país/distrito garantizara a cada ciudadano una bicicleta: con un costo menor que las gabelas a los combustibles fósiles, y la expansión exhaustiva del transporte masivo, erradicarían reconocidas externalidades multisistémicas.

Resolviendo objeciones, podrían facilitar triciclos o sistemas públicos de bicitaxi, exclusivamente movilizados por energías limpias, para quienes manifiesten que no saben utilizar la bicicleta, no tienen adecuadas condiciones físicas o no desean hacer su uso, como el senador Uribe, a quien solo le interesan los caballitos del Ubérrimo.

Considerando que Renault advirtió “la mayor crisis que enfrenta la automoción y la urgencia de la transición energética”, esta pandemia era una oportunidad histórica para reivindicar ese invento que desde 1866 revolucionó la sociedad, empoderando a los pobres y las mujeres. Pero, por causa del tándem CD, los tradicionales caprichos ciudadanos y los dogmas empresariales, eternamente seguiremos esperando hasta mañana, como en la absurda tragicomedia Esperando a Godot (Beckett).

Es necesario formular políticas públicas, y no solo decretos de emergencia; propiciar una adecuada cultura ciudadana, y activar tanto medios como incentivos que pongan fin a los vehículos que tradicionalmente dominaron el siglo pasado, pues, según el Copenhagenize Index (2019), estamos rezagados.

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Nota Ciudadana
La Nota Ciudadana se va de vacaciones

La Nota Ciudadana se va de vacaciones

Nota Ciudadana
Profes de cátedra de la Universidad de Antioquia: sin un peso para terminar el año

Profes de cátedra de la Universidad de Antioquia: sin un peso para terminar el año

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--