No hay nada más fresco, divertido, dateado en la radio deportiva nacional que el programa de Peláez y De Francisco en la W Radio. Arrancaron hace dos años, de 2 a 3, con cautela, creyendo que no había necesidad de competir con El pulso del Fútbol, el programa que supieron potenciar Iván Mejía y el propio Hernán desde comienzos del siglo XXI. Pero, con la salida de Mejía, el Pulso es sólo un remedo en manos de César Augusto Londoño y Oscar Rentería. Por eso hay sangre y la W Radio lo sabe.
Desde finales del 2021 en los mensajes de los oyentes venía la súplica: querían mas programa. Es que, aunque arrancaron con dudas, Peláez estabilizó el barco, canalizó la energía de De Francisco y logró una química única, un contraste tan marcado como el que hay desde Luis Alcaraz hasta Tom Araya de Slayer y, contra todo pronóstico, funcionó. Si, es fútbol y algo más. Mientras César Augusto lo único que tiene juvenil son sus tenis rojos, Peláez sabe tanto de radio que supo amoldarse a los nuevos tiempos y por eso resume frescura, además de que saben que la gente, cansada de tanto uribismo, quieren un periodismo deportivo que sepa tomarle el pulso al país. Un país harto del orden establecido, un país que quiere cambios.
Por eso ya tienen todo listo para entrarle a disputar el reinado de la una de la tarde al Pulso y vaya que se darán la pela. Irán, desde el próximo lunes 17 de enero vuelven más recargados que nunca, con su arsenal intacto, y mientras César Augusto y Rentería son sinónimo del viejo orden establecido, siguen siendo guardianes de la Dimayor y sus gerentes, del gobierno y el poder, los viejitos Peláez y de Francisco son la rebelión, la bocanada de aire fresco que le hacía falta a la cloaca en la que se han convertido los medios en Colombia.
Seguiremos de rodillas a los reyes del mambo y del Heavy Metal. Las tardes nunca volverán a ser iguales. A la mala noticia que recibió ayer Londoño, de no ir mas en Win, se suma a que por fin tendrán un rival de peso en la exigente franja de la una de la tarde. ¡Que comience la competencia!
