Me imagino que Pacho pudo haberle pedido el favor de manera que le sirviera como columna de humo ante su desastre. Si Pacho ya no podía ser presidente, ¡snif, snif!, por lo menos que lo fuera, siquiera candidata furtiva, su amiga del alma.
Pacho se habría dado cuenta de que el presidente le ordenaría regresar al país en un avión carguero fletado especialmente para traer 50.000 vacunas.
—No puede ser, María Fernanda— le habría suplicado. —Mira que en ese carguero sobra mucho espacio; incluso si trepo allí los votos obtenidos a favor de Trump presidente. Y además, si me subo al avión sonaría como si estuviera siendo fletado solo para traer desperdicios.
El clamor del despampanante ex embajador en Washington, fletado con su ominosa gordura y su bigote, no podía ser más lastimero.
Y María Fernanda escuchó las súplicas de un viejo amor. Podía servirle para cultivar su propia ambición presidencial. Supuso que si Pacho de todas maneras había cumplido con la orden de aprovechar la embajada para tumbar a Maduro, también contaría con la aquiescencia de Uribe para lanzar su candidatura.
Entonces todo eso está quedando en las sombras. Ahora no saben qué hacer para que María Fernanda no sea la simple candidata de Pacho. Y es que Pacho está muy gordo, pesa mucho y María Fernanda no despega ni un milímetro. Pero Pacho le habría estado diciendo:
Pero María cómo puede una candidatura despegar después de mandar a García Márquez al infierno. Mira que los muertos pesan. Incluso si son falsos positivos.
Y es que Pacho no tiene votos. Incluso luego de ser vicepresidente de ya se sabe quién. Es decir, solo tiene los que pudo haber traído en el avión, obtenidos mediante la estratagema de Trump presidente.
Y por eso, para ser consistente, Pacho le ha recomendado que use la consigna: Colombia, First Again!
Así las cosas, es obvio que nada más podría esperarse de estos dos genios.
Si hay uno actualmente en la presidencia, estos otros dos dicen, ¡apártate!
¡Y así son toditos!, ¡cortados por las mismas tijeras!
Todo esto solo refleja la terrible obnubilación que pesa sobre el partido Centro Democrático. Se trata de esta disyuntiva: ¿cómo seguirle sosteniendo la caña a Trump de que no ha perdido las elecciones y al mismo tiempo recibir beneficios y ayudas de la administración Biden?
Solamente una persona demente superior puede albergar semejantes pretensiones desde su mansión ubérrima.
Finalmente, Fernanda María sueña con la siguiente dádiva: si Pacho logró que Trump ordenara una recompensa de cinco (5) millones de dólares para que le entregaran la cabeza de Maduro, por qué no solicitarle al nuevo Pinzón embajador gestionar que tal suma pase a financiar su campaña. De esa manera la embajada estaría sirviendo para algo útil al país y a la ¡patria colombiana!
La idea es tan brillante que todos hasta ahora no dudan que la nueva embajada ya tiene una consigna que cumplir. No se demora un mes para que regrese la vicepresidenta en una nueva gira triunfal. ¡Qué oso!
Sin embargo, quedan muchas cosas en el tintero. Por ejemplo, si Duque debió encanecerse, como los toros miuras, para lucir más viejo y simular una imposible experiencia, ¿qué necesitará afeitarse María?
¡Pechugas! Pechugas, Pacho, ahora tienes suficientes como para poderla aconsejar bien. Eso que sea un secreto de Estado.