Los colombianos todavía recuerdan cuando la diva más rebelde del país fue virreina en el Concurso Nacional de Belleza y, aunque no ganó, a diferencia de otras candidatas, a la niña Mencha no la olvidaron.
Irreverente, talentosa y defensora de las mujeres se ha abierto camino más allá de la televisión. Su consistencia política y artística la convirtieron en un ícono televisivo inspirador que ha tomado fuerza gracias a sus trinos desafiantes y videos que demuestran que fue mucho más que una cara bonita.
En medio de la polémica que puede traer hablar del aborto, y en general, de ser mujer en Colombia, la actriz nunca ha tenido pelos en la lengua cuando de frentear se trata. Con mucha valentía, por medio de un video publicado en su Twitter, hace poco confesó haber abortado :“Yo aborté una vez en mi vida y cuando lo hice ni siquiera sabía que eso era un delito”. Durante casi dos minutos, la actriz envió un contundente mensaje a la Corte para despenalizar el aborto justo en momentos álgidos de debate. “No más castigo por ser mujeres” continuó Margarita que recuerda la decisión como algo difícil, pero de la que no se arrepiente.
#causajustaporelaborto #cortevotesí @causajustaco pic.twitter.com/B8NbDZ0sRb
— Margarita Rosa (@Margaritarosadf) November 17, 2021
“Ninguna mujer que haya decidido interrumpir un embarazo dejará de hacerlo sin importar cuánto se le amenace o castigue, sin importar si el precio con el que paga es el de su propia vida” afirmó la protagonista de Café con aroma de mujer para alzar su voz y hablar por muchas mujeres que se han visto afectadas por el Código Penal colombiano, el mismo que señala y atribuye hasta 54 meses de presión a quienes recurran a esta práctica sin estar dentro de las tres causales aceptadas desde el 2006: por malformación del feto, violación o cuando la vida de la mujer está en peligro.
“Yo me niego a aceptar que una autoridad externa al libre arbitrio de la mujer misma categorice un delito especialmente para mujeres construido a la medida de su culpa y que haya un pecado al que solo a las mujeres se nos condena” advirtió Margarita Rosa de Francisco esperando el fallo que la Corte Constitucional, quien debía responder hasta este viernes 19 de noviembre, pero que por un conflicto de intereses de los magistrados, se aplazó.
A esta experiencia se le suma la historia que Margarita tuvo la valentía e contarle al mundo. Ocurrió cuando tenía 8 años, mientras estaba en una piscina junto a su hermano y el conductor de la familia que en ese momento tenía 25 años. El hombre la invitó a enseñarle a conducir el carro familiar y, en ese momento, Margarita Rosa de Francisco cuenta uno de los peores momentos que tuvo en su vida.
El hombre la hizo vestir y la montó en el carro, la llevó a una carretera destapa cerca al Aeropuerto de Cali. No pasó mucho para que la invadiera el miedo, el pánico se apoderó de su ser y supo, a pesar de su inocencia, de que algo no estaba bien. "Empiezo a sentir el pene de él, pero tengo la confusión entonces de que me había sentado encima de la palanca de cambios, y yo estoy cogiendo el timón con las manos. Tengo al hombre detrás con una respiración horrible". Margarita Rosa culminó su relato con una increíble reflexión, el violador no es un individuo, sino un sistema de abandonos y de duelos desiguales encadenados unos a otros. Su pelea por la defensa de los derechos de las mujeres no da tregua.