A sus 39 años, Juan José Valencia Zuluaga -o más conocido como Falcon- estaba en la cima del poder y si que sabía aprovechar su status como uno de los duros narcos del Clan del Golfo y hombre de confianza de Otoniel. A Falcon que se disfraza de empresario le podía entrar más de 60 mil millones de pesos al mes, una fortuna con la que se dio lujos inimaginables para alguien de clase media ni siquiera para alguien con dinero. En su mansión de más de 9 mil metros cuadrados ubicada en Llano Grande, Antioquia tenía sala de cine, cancha de bolos, cancha de fútbol, salón de polígono, capilla, picadero de caballos y casa de huéspedes. Sin mencionar el estacionamiento en donde tenía sus 30 vehículos de alta gama.
Sin duda, los que más llamaban la atención eran el Volvo, Mercedes, Lexus Toyota, BMW y una moto BMW de $70 millones. Todo ascendían a los 6 millones de pesos. Sin embargo, sus automóviles favoritos era el Ferrari rojo 812 Superfast modelo 2020 que cuesta $1.400 millones y un Ferrari blanco Portofino modelo 2019, avaluado en $1.200 millones de pesos. Valencia tenía fincas en todo el territorio colombiano, en Buenavista, Planeta Rica en Córdoba, Medellín, La Ceja, Rionegro y Caldas que tendrían un valor de $232.000 millones.
La buena suerte y dicha se le acabó a Juan José Valencia el 22 de mayo cuando fue capturado por las autoridades acusado de ser el encargado de articular la salida de cargamentos de cocaína hacia Estados Unidos, Centroamérica y Europa. En el allanamiento le decomisaron 9 pistolas, 3 revólveres, 1 subametralladora, 3 escopetas, 2 fusiles, 35 proveedores, 3 miras telescópicas, 1 adaptador para subametralladora, 3 cañones para pistola y un visor nocturno.
Mientras espera su condena y posible extradición a Estados Unidos. A continuación, imágenes de los lujos de alias Flacon a los que ya le aplicaron extinción de dominio:
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