“Podemos ser un estudiante universitario, o podemos ser un turista. La lista de perfiles y páginas falsas y que podemos crear es infinita”. La asesoría de Cambridge Analytica, la empresa que esta a la base de las actividades en redes sociales que le dieron el triunfo a Donald Trump, no es del todo transparente según las cámaras escondidas del Canal 4 de Nueva York en conversaciones con varios altos mandos de la empresa. En Colombia tenían, según sus records, un cliente: Enrique Peñalosa
Aparecer aquí un Enrique Peñalosa quieto en la calle, mientras sombras caminan a su lado. Él está sonriendo, y debajo de esa foto aparece un texto: Caso de éxito, Enrique Peñalosa.
Así aparece registrada la supuesta asesoría que habría dado Cambridge Analytica, CA, a la campaña de Peñalosa en el 2015 en la que le ganó la Alcaldía de Bogotá a Rafael Pardo. La empresa norteamericana, y que ya tiene sede en cinco países del mundo, hoy está citada a declarar en el Senado de los Estados Unidos.
Hay algunos indicios de que ciertamente el método de actuar Cambridge Analytica tuvo eco en Colombia. El año pasado, varias veces Peñalosa estuvo de tendencia. Le estaba ocurriendo algo particular: docenas de personas que parecían reales en Twitter publicaban exactamente el mismo mensaje, como si fuera una plantilla. Apareció la sospecha de que la alcaldía tenía cuentas falsas. ¿Estaba ahí la mano de la compañía norteamericana?
Claro, no son cuentas falsas sino que su amor por Peñalosa los sincroniza. ? #FueraPeñalosa pic.twitter.com/2KNe0TIxhK
— María A. De La Torre, Ph.D. (@Caidadelatorre) 4 de noviembre de 2017
Por crear cuentas falsas, por traficar con información de Facebook, CA está hoy en el ojo del huracán. El escándalo es tal que el creador de Facebook, Mark Zuckerberg, ha sido llamado a testificar y la acción de la compañía ha bajado casi un 10% en tres días.
Se le acusa a la compañía de violar la privacidad de sus usuarios y entregarle datos de los perfiles de 50 millones de americanos a CA, quién los utilizó para diseñar estrategias de publicidad política personalizada aprovechando los miedos, intereses, deseos y demás sentimientos de los votantes.
Si usted lee mucho de motos, y en su muro de Facebook cuelga fotos de motos, la campaña que compró esa información le sugeriría publicidad - una real y otra ficticia - sobre lo que el candidato dice sobre motos.
Pero la venta de datos podría ser lo menos escandaloso. Según las grabaciones del mismo canal, el trabajo legal y frontal de la empresa era solo una parte. La mayoría lo hacían a escondidas. Contrataban antiguos espías de varios países y negociaban a través de empresas fachada.
Otra estrategia que ofrecían: citar a un candidato que fuera opositor de su cliente, inventarse un personaje falso, y ofrecerle algún acto de corrupción. Pagarle un soborno, y grabar todo eso. Luego el video terminaba en redes sociales, “y después ver crecer ese fenómeno.”
La idea central de CA es poder grabar al oponente del cliente en algo embarazoso. Por lo mismo, podían contratar mujeres, “todas hermosas por supuesto” y enviarlas a las casas de esos contrincantes. Queda la grabación de una mujer saliendo de la casa. El escándalo es seguro.
Uno de los hombres más poderosos del mundo, Donald Trump, contrató a esta empresa. Quedó Presidente de los Estados Unidos. Pero están investigando la legalidad de usar los datos privados de Facebook para dárselos a campañas políticas. Las acciones de la red social han caído un 15 por ciento en dos días.
Pero CA no solo se nutre, aparentemente, de Facebook. Según varios medios de Estados Unidos, en Colombia y México habría una aplicación que también está relacionada con ellos. Se llama Pig.gi y la idea es que usted consuma contenido que ellos escogen (casi siempre publicitario) y a cambio le dan descuentos a través de cupones.
La empresa Cambridge Analytics la fundaron Steve Bannon y Robert Mercer. Bannon fue director del portal radical Brietbart, mega asesor de la campaña de Trump y quien le habló al oído durante seis meses en la Casa Blanca con asiento en el Comité de seguridad. Robert Mercer, multimillonario donante de la campaña de Trump, de quién dicen es el poder detrás del presiente, le invirtió 15 millones de dólares a CA.
El escándalo, que inició por las declaraciones de un extrabajador de CA llamado Christopher Wylie, apenas comienza. Los senadores Demócratas en Estados Unidos no dejarán pasar la investigación que pone en entredicho el triunfo que resultaría poco legítimo del presidente Donald J. Trump.
En Colombia la campaña de Enrique Peñalosa se desmarcó de los señalamientos de haber contratado a la empresa, pero todavía no explican por qué la foto del Alcalde de Bogotá aparece en la página de Cambridge Analytica.
*Con la colaboración de Diego Alvarado
