En Cali escasean los skateparks, si mucho hay 2 o 3 y ninguno con el llamado bowl que en otras palabras es una piscina vacía pero ya adecuada para el uso de las patinetas, patines o bicicletas. Pero en Yumbo ya se construyó la primera etapa de tres que están previstas para el parque público de skate. Esta primera etapa del parque tiene varios elementos que ya lo hacen único en el Valle. Primero y más importante es el bowl del que ya varios entusiastas de la zona han dado sus opiniones. Aunque presenta algunos inconvenientes en los empalmes de las secciones y poco espacio en las salidas, es un lugar que ha favorecido el crecimiento atlético de los que asisten y ha ayudado a promover eventos que ellos mismos organizan y ponen en pie. El segundo atractivo es que cualquiera puede entrar y disfrutar de una tarde de diversión sin pagar un peso, lo que les da la oportunidad a los niños que frecuentemente asisten, de convertirse en grandes del deporte.
Tengo dos observaciones por hacer.
La primera es que la iluminación es escasa y proyecta sombras que pueden llegar a ser peligrosas para los que están dentro del bowl. Además permanece prendida la mayor parte del día, produciendo gastos innecesarios. La segunda observación es la falta de basureros en la zona. Ayer que asistí, recogí más de 10 botellas plásticas, papeles y demás basuras. Hago un llamado para que todos los que asisten al skatepark, lo cuiden y respeten ya que es de todos y para todos. Hacen falta basureros (no hay ni uno) pero mientras se soluciona este problema se puede colgar un bolsa de basura a un árbol y depositar los deshechos ahí. Sugerencias hay muchas, la decisión y la actitud viene de cada uno de nosotros.
Así que quedan invitadísimos a hacer parte de esta comunidad que cada día crece más y que abre las puertas a los recién llegados sin prejuicios de ningún tipo. Anímense aunque sea a ver como vuelan estos pelados y a sorprenderse con los niños de no más de diez años tirándose sin miedo alguno.