El mal ejemplo de magistrados, fiscales, y muchos funcionarios públicos, puso en tela de juicio a quienes con esfuerzo y dedicación entregan su vida para estudiar derecho, y defienden la ley después de conocer los códigos extensos de procedimientos, ser catedráticos y tener puestos importantes.
Nuestro país hoy está cundido de males que avanzan acompañados de la anuencia y alcahuetería de funcionarios de alto turmequé, expertos en corrupción, que levantan delitos en donde no existen, simplemente para conseguir infantilmente plata, olvidándose de los perjuicios que ocasionan a las personas de bien, sus familias y la sociedad. La ley debe castigar y descubrir a todo funcionario corrupto, caiga quien caiga, si queremos un país democrático y en paz.
Los congresistas corruptos y eunucos que no investigan sino que eligen a dedo presidencial lo que les pongan son los responsables.
El pueblo conoce los escandalosos delitos porque son importantes sus cuantías, pero por qué no se hacen conocer los pequeños casos, cuántos pueden suceder en fiscalías, juzgados, inspecciones de policía, alcaldías, etc. Aunque no produzcan corrupción en muchos pesos, posiblemente existen y hacen parte del silencio. Además, los afectados temen el uso inmisericorde del abuso de autoridad y poder que maneja a los policías con sus excepciones que se están convirtiendo en abusadores según las redes sociales.
¿Cuántos funcionarios de los entes de control, mañosos, que inventan las formas de robar existen?, ¿cuántos pueblos están invadidos de contratistas corruptos y testaferros que se pueden estar apropiando miserablemente de los recursos del pueblo, utilizando las comisiones prohibidas en la obras? La corrupción que carcome nuestras instituciones, debe ser desterrada y cambiada electoralmente, por personas que quieran el país y no se vendan en el congreso, asambleas y concejos. ¿Por qué los elegidos para estas curules deben hacer las mayorías que respalden al presidente, gobernador, alcaldes?, ¿será que los necesitan para robarse los recursos, repartirlos a dedo y seguir acabando con el país?
La inmunidad a todo nivel debe desaparecer si queremos un país que progrese y sea sano. Todos en la cama o todos en el suelo.
¿En Colombia los elegidos quieren estar blindados pretendiendo ser los superhéroes corruptos que andan felices por las calles así sean delincuentes?