Fecode que se dedique a trabajar y cobrar por el trabajo, día sin trabajar, día sin pagar. Los impuestos hay que cuidarlos. Pero cuando es funcionario público hay que dar buen ejemplo a la sociedad para ser dignificado. comparemos al docente de hoy con el docente de ayer. El de hoy promueve marchas, plantones, incita a los alumnos y padres de familia a ir contra el gobierno. Ningún gobierno les sirve, no cuidan lo público, les da lo mismo trabajar, menos incentivar al trabajo y respetar las autoridades, sin ignorar que tienen pésima presentación personal.
El docente de ayer enseñaba modales, enseñaba valores, los contenidos los explicaba y el alumno profundizaba investigando. No se inmiscuía en política, cada quien a medida que crecía definía qué camino seguir. El docente nunca incitaba que los alumnos bloquearan vías, que irrespetaran la autoridad local, departamental o nacional. Promovía a cuidar el bien público, valoraba los impuestos que pagaban los padres de familia. Los símbolos patrios y respeto era una constante. Por eso hoy hay ciudadanos que vemos con tristeza cómo los docentes perdieron el sitial, ese ciudadano modelo.
Los docentes no deberían hablar de política, mucho menos promover marchas y protestas. Su función es enseñar. Todos a favor de Carlos Antonio Vélez.
Dolor de patria.
