A menos de 24 horas de la posesión de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela por un tercer período de 6 años sin la legitimidad de haber ganado las elecciones el pasado 28 de julio, la situación política del país se torna cada vez más confusa y con tendencia a agravarse. Aunque fuera liberada después de algunas horas, la detención de la líder de la oposición María Corina Machado tras una manifestación masiva que tuvo eco en el mundo enturbia aún más las cosas y puede cambiar el escenario internacional de los países que aún apoyan al régimen que continuaría con el control de todos los poderes, pero sin haber logrado imponerse en las urnas.
Desde el inicio de la Revolución Bolivariana con Hugo Chávez en 1998, el régimen venezolano siempre había logrado su refrendación con el voto popular, así se hubiera dado con conteos espurios como ocurrió con la última elección en la que Chávez se impuso a Henrique Capriles por un estrecho margen en el 2012.
Sin embargo, esta vez, Nicolás Maduro no logró imponerse en las urnas en las elecciones del 28 de julio y mantuvo su poder sin haber demostrado el resultado a través de las actas de las mesas de votación que documentaran su triunfo sobre el candidato de la oposición Edmundo González. La confusión que se vive no permite predecir lo que vaya a ocurrir. El internacionalista Ronal Rodríguez, investigador y vocero del Observatorio de Venezuela, analiza las distintas variables en esta conversación con Juan Manuel Ospina y Adolfo Beck que permite entender lo que está pasando.
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