Tres madres, dos hermanas, una esposa. Todas ellas son como un solo rostro: el del dolor, la angustia, la desazón. Son familiares de los jóvenes detenidos por orden de la Fiscalía y enviados a prisión, luego de procedimientos exprés, para sindicarlos, sin pruebas, del incendio del Palacio de Justicia de Tuluá, ocurrido el 25 de mayo de 2021.
En todas ellas se refleja el sufrimiento que representa la cárcel a la que son sometidos sus seres queridos: Daniel Navarrete, Jorge Andrés Noguera Flórez, Santiago Ramírez Duke, José Mauricio García Nieto, Jorge Mario Ramírez y Dan Brayan Andrade.
Por estos días, el Estado colombiano despliega su aparataje jurídico para castigar a los participantes en el paro nacional y para endilgar presuntas responsabilidades penales, en la mayoría de los casos sin fundamentos sustanciales, a jóvenes ciudadanos con cuyas capturas buscan mostrar resultados y eficacia, así esas acciones no pasen de ser, como se ha denunciado en el caso de Tuluá, falsos positivos judiciales.
En la Plaza Céspedes, frente al Palacio de Justicia, encontramos a las familiares de los muchachos procesados por los hechos que sacudieron a la llamada ciudad corazón del Valle cuando estaba a punto de cumplirse el primer mes del Paro.
Mirando a los ojos y con la tristeza marcada en sus rostros, las entrevistadas denunciaron que las detenciones son absurdas, pues incluso tres de los muchachos fueron aprehendidos a las 5:30 de la tarde, dos horas y media antes del incendio, uno de ellos fue capturado en momentos en que se encontraba en jornada laboral en su mototaxi, y otro, cuando salía de su trabajo de mecánico. Uno de los muchachos se hallaba en un punto bastante retirado del Palacio de Justicia. Otro estaba laborando en la repartición de pedidos de refrescos Postobón.
A ellas las acompañaban cuatro familiares más, con su solidaridad incondicional, lo mismo que Isaac Bermúdez González, del Observatorio de Derechos Humanos de Tuluá, y el abogado Juan Carlos Herrera, defensor de dos de los sindicados.
Los detenidos fueron remitidos a Popayán, donde se encuentran sometidos a prisión mientras se desarrolla el proceso judicial. Son presos sociales y políticos del régimen de Iván Duque. He aquí los testimonios de las familiares que hablaron con Periodismo Libre:
Habla Yedi Betancourt, esposa de Daniel Navarrete
Daniel Navarrete fue detenido el 25 de mayo, a las 5:30 p.m., en Tuluá.
–Yedi: coméntenos en primer lugar, por favor, quién es Daniel Navarrete, su esposo.
–Es un joven muy responsable. Más o menos desde los 15, 16 años empezó a trabajar porque él es de una vereda del corregimiento de Trujillo. Desde los 18 años se fue para la ciudad de Tuluá a desempeñarse como mecánico, y yo vivo con él desde hace dos años. Nos apoyamos mutuamente, ya que yo también estaba sola. Daniel se desempeña como mecánico acá en la carrera 30 de Tuluá. El día de su captura estaba trabajando y a los pocos minutos que salió del trabajo fue capturado.
–¿Cómo ocurrió esa detención, por qué lo sindican de unos hechos que ocurrieron después de su captura?
–Él nos dice que salió del trabajo con dos compañeros más y se dirigió acá hasta la esquina y la policía lo empezó a seguir y el corrió un poco hacia Sinergia. Cuando llegó a Sinergia, lo capturan y lo llevan al CAI. En ese momento yo me dirijo al taller y es cuando me entero de que fue capturado. Voy a la estación y me dicen que él no está allí. Me llaman a las nueve de la noche a decirme que él estaba ahí y que lo estaban acusando de esos delitos. Entonces cuando yo puedo hablar al otro día con él me dice que una persona de la Sijín los escogió, decía: “Éste se queda, éste no se queda”, así fue. En eso quedaron los muchachos que están sindicados.
–¿Quién hacía ese perfilamiento?
–No, él no sabía. Lo único que sabe es que es una persona de la Policía.
–¿Por qué corrió él cuando lo detuvieron?
–Porque la Policía lo estaba siguiendo.
–¿Él se hizo presente para participar en la protesta o iba de paso?
–Nunca había participado en una protesta, ni siquiera en una marcha, en nada.
–Y así hubiera participado estaba en su derecho, ¿qué gestiones han hecho ustedes en relación con esta detención?
–Hasta el momento hemos aportado todos los videos que demuestran que él estaba trabajando en el momento de su captura. No ha sido mucho lo que hemos podido hacer porque no hemos podido tener contacto directo con él, solamente por llamadas.
–¿Qué acusaciones tiene la Fiscalía contra él? Es un derecho que tienen ustedes de conocer la acusación.
–No, la Fiscalía nunca se ha comunicado con nosotros.
–¿Qué mensaje tienen ustedes para las autoridades en relación con el caso de su esposo?
–Ellos necesitan mostrar responsables, pero que busquen a las personas que son, porque están metiendo muchos jóvenes inocentes que no tienen nada que ver y que deberían ser más humanos, porque ellos también tienen familias.
–¿Qué esperan ustedes al final de este proceso?
–Que nos entreguen a nuestros jóvenes sanos y salvos.
Habla Bernarda Flórez, madre de Jorge Andrés Noguera
Jorge Andrés Noguera Flórez fue detenido el 25 de mayo, a las 5:30 p.m., en Tuluá.
–Inicialmente, señora Bernarda, háblenos, por favor, acerca de su hijo.
–Mi hijo es trabajador, muy juicioso. Trabaja con un jardinero, es ayudante del parque y también trabaja mototaxi en los tiempos libres. Tiene 23 años de edad, está soltero.
–¿Qué estaba haciendo en el momento en que fue detenido?
–Estaba trabajando en la moto, que es la herramienta para su sustento.
–¿Por qué lo detuvieron?
–Estaba en el sitio equivocado. Él no estaba haciendo nada malo. La moto la llevaron a la alcaldía y nos la regresaron. A él le dijeron que le iban a hacer un comparendo, y cuando lo llevaron al comando le dijeron que quedaba detenido.
–¿En qué momento les comunican a ustedes que está capturado y sindicado del incendio del Palacio de Justicia?
–Cuando ocurrió la quema, él ya estaba capturado.
–¿Por qué lo sindican de un incendio que ocurrió después de que a él lo capturaran?, ¿qué ha averiguado usted?
–De eso no nos han dicho nada, sino que a él lo sindicaban dizque de terrorismo.
–¿Qué ha dicho el abogado?
–El abogado nos dice que mi hijo no tiene nada qué ver, porque en la captura no está implicado en algo, que lo del Palacio de Justicia fue a las 7:45 p.m. y ya mi hijo estaba capturado.
–Señora Bernarda, ¿qué reclama usted?
–Exijo la libertad de mi hijo, porque él es inocente, y que no se cometan más injusticias.
Habla Rocío Noguera, hermana de Jorge Andrés Noguera
–Indíquenos, Rocío, ¿qué supo acerca de la detención de su hermano?
–A él lo capturaron a las 5:30 p.m. Como mi mamá dijo, él trabaja en el transporte informal. Ese día estaba laborando, estaba haciendo una carrera, dejando una persona allá. En ese instante que lo capturaron estaba subiéndose a la moto, porque como buen curioso tulueño, como somos la mayoría, él se asomó, dejó la moto cuadrada.
A él lo capturaron cerca de la Alcaldía de Tuluá, entre la 25 y la 26. Le informan a mi madre como a las 7:30 de la noche que él estaba capturado. Le dieron un permiso para llamar. En el momento en que lo capturaron él no tenía nada que lo comprometiera, nada con disturbios o algún elemento para la quema del Palacio.
–¿Por qué creen ustedes que esto ha ocurrido?
–El gobierno necesita culpables y acá en Tuluá están haciendo falsos positivos.
–¿Qué exigen ustedes?
–La libertad de los jóvenes, la libertad de mi hermano, que le quiten los cargos, porque él no es un delincuente, no es un bandido como están diciendo, que dizque está detenido por terrorismo, por la quema del Palacio. A él no le encontraron ningún elemento que lo pueda incriminar en ese sentido.
Habla Daniela Ramírez, hermana de Santiago Ramírez
Santiago Ramírez Duke fue detenido el 25 de mayo a las 8:00 p.m., en Tuluá.
–Daniela: háblenos, por favor, sobre su hermano.
–Mi hermano es un muchacho de 27 años, trabajador, echado para adelante. Es papá de un niño de cinco meses, trabajaba en un grupo ambiental, porque es tecnólogo ambiental egresado del Sena, pero por la pandemia se le canceló el contrato. Nosotros tenemos una empresa familiar pequeña y nos estaba colaborando con las ventas.
–¿Qué estaba haciendo él cuando fue detenido a las ocho de la noche del 25 de mayo?
–Él estaba en el Parque de la Teta, muy lejos y retirado del sitio de los hechos. Él estaba ahí departiendo con unos amigos cuando pasó la tanqueta, y la versión que nos dan es que ellos empezaron a decir: “El mono, el mono, cojan al mono”. Se le fueron encima y lo capturaron.
–¿Por qué?
–No sabemos por qué, esa es la misma pregunta que nosotros nos hacemos, por qué a él.
–¿Estando él sentado en el parque?
–Es muy retirado de acá.
–Ni siquiera estaba en el área del incendio del Palacio de Justicia.
–No, eso es muy retirado del sitio, no tenía nada que ver.
–¿Han averiguado con quienes lo detuvieron por qué lo hicieron?
–Hemos hecho preguntas y es lo mismo, por qué a él se lo tenían que llevar.
–¿Qué les ha dicho la Fiscalía?
–La Fiscalía con nosotros no ha tenido ninguna comunicación.
–¿Entidades de derechos humanos los están asesorando?
–Sí, nos han hecho acompañamiento, nos han informado cuando los trasladaron a la ciudad de Popayán, han estado en las actividades.
–¿Han podido hablar con sus familiares en Popayán?
–Durante 15 días estuvieron aislados, sin poder comunicarse con nosotros, y pues hemos tenido comunicación, pero a través de llamadas de un minuto, dos minutos.
–¿Cuál es el estado de ánimo de él?
–Pues él dice que está bien porque tiene la comida y la dormida allá, pero le da muy duro por su hijo de cinco meses que está desamparado sin él.
–¿Qué dice la esposa?
–No, pues imagínate, está sola prácticamente.
–¿La madre?
–Mi mamá está muy afectada.
–¿Qué piensan ustedes de toda esta situación?
–Yo pienso que uno no sabe o acepta las cosas hasta cuando le toca vivirlas. Nunca nos imaginamos que nos iba a tocar pasar por algo así a nosotros y es algo que a diario vive Colombia. Nunca sabemos lo que tenemos hasta que nos toca. Han sido días muy difíciles por la injusticia, porque ellos no hicieron nada por lo que los están judicializando.
–¿Qué reclaman ustedes?
–Reclamamos la libertad y el nombre en limpio de nuestros jóvenes.
Habla Mónica Nieto, madre de José Mauricio García
José Mauricio García Nieto fue detenido el 25 de mayo a las 5:30 p.m., en Tuluá.
–Señora Mónica: háblenos, por favor, sobre su hijo.
–Es un joven de 24 años de edad muy trabajador. Labora en Postobón hace 4 años, vela por mí y sus hermanitas. Tiene una hermana de 23 años y otra de 20. Lo capturaron el 25 de mayo. Hizo hasta noveno grado de bachillerato.
–¿Qué hace en Postobón?
–Trabaja en cargas y descargas de productos.
–¿Qué se encontraba haciendo él en el momento de la detención?
–Estaba trabajando en la carrera 22. Se encontraba llevando un pedido.
–¿Por qué lo detienen si estaba trabajando?
–Porque en eso se formó todo eso de la quema del Palacio.
–¿Pero él no argumentó ante la Policía que estaba trabajando?
–A él lo cogieron y lo capturaron ahí, la Policía.
–¿Han pedido explicación del porqué de ese procedimiento?
–Sí, cuando lo capturaron.
–¿Y qué dijo la Policía?
–Nada, no dan respuesta de nada.
–¿Qué reclama usted?
–Que lo liberen, pronta liberación.
–¿Qué gestiones han hecho?
–Pues cuando nos han llamado a entrevistas.
–¿El padre qué dice?
–El papá de él está muy enfermo.
Habla Mariela Alzate, madre de Jorge Mario Ramírez
–Señora Mariela: coméntenos, por favor, sobre su hijo.
–Él es la cabeza de hogar, es el que vela por nosotros en la casa. Es muy echado para adelante, muy trabajador. Trabaja en un taller. Responde por mí y por la hermanita. Tiene 22 años de edad.
–¿Qué hace en el taller?
–Trabaja en una vulcanizadora de carros.
–¿Qué se encontraba haciendo él en el momento de la detención?
–Él estaba trabajando y pasó por ahí cuando lo detuvieron.
–¿Qué le informaron a usted acerca de la detención?
–No me dijeron nada.
–¿Qué reclama usted?
–Justicia y la libertad, eso es lo único.
* Familiares de Dan Brayan Andrade no pudieron estar presentes en la Plaza Céspedes, donde se hicieron las entrevistas.