Por primera vez los dos candidatos de los tradicionales partidos franceses quedan por fuera de una segunda vuelta en las elecciones presidenciales. El joven centrista Emmanuel Macron obtiene el 23, 9 % seguido por la ultraderechista Marine Le Pen, 21,70 %, con 90 % de votos escrutados.
En lona han quedado el conservador Francois Fillon, con el 19,98 %. El escándalo de los empleos ficticios de su esposa, por el que le abrieron investigación, le costó la derrota. El socialismo ha sufrido una estrepitosa caída, su candidato Benoit Hamon apenas si ha logrado el 6,29 %.
La izquierda radical de Jean-Luc Mélechon (Frente Izquierdas) que había tenido un monumental repunte en las semanas-preelectorales ha logrado el cuarto puesto con el 19,40 %.
El 7 de mayo se medirán Macron y Le Pen, con el gran interrogante de si Francia debe permanecer en la Unión Europea. La "eurofoba" Le Pen medirá fuerzas con europeista Macron.
Al filo de concluir el recuento de los votos, tanto Fillon como Hamon anunciaron su apoyo para Macron en la próxima batalla electoral.