Cuando se supo que Luisa Fernanda W sería jurado del Miss Universe Colombia, los más puristas en el tema pusieron el grito en el cielo. La influencer, que compra ropa solo por la marca más que por la misma influencia de la moda, no tiene estudios en el tema, y fue casi un sacrilegio que la pusieran a la misma altura que Olivia Quido.
Durante el certamen la presentaron como una exitosa cantante a nivel mundial y los seguidores en las redes no perdonaron el título, sobre todo conociendo que sus éxitos musicales no es que sean tan conocidos más allá de su youtube.
Hasta su marido, Pipe Bueno, brilló más que ella en el concurso. Salió a interpretar sus canciones y como ya tiene acostumbrados a los colombianos, con puro despecho puso a cantar a los asistentes del evento mientras Luisa Fernanda ni siquiera aparecía en cámara.
Cuando llegó el momento de las preguntas a las candidatas no fue distinto, su pregunta dejó mucho que desear y no estuvo al nivel de los otros jurados, quienes presentaron temas profundos y hasta controversiales, pero ella solo se quedó en la superficialidad de los prejuicios.
Si la jugada era que con Luisa Fernanda W el reinado tuviera más audiencia, pues tampoco funcionó. Su 5,7 de rating demuestra que lo peor que hicieron las directivas del concurso fue haber privatizado un evento que era del pueblo, y que era sagrado para el pueblo cartagenero.
Ya nadie ve el Concurso Nacional de la Belleza, mal llamado Miss Universe Colombia, y si para el siguiente volverán a invitar figuras como Luisa Fernanda, será el final del reinado en nuestro país.
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