Representante del pueblo Kankuamo, su mensaje siempre fue “cuenten con nosotros para la paz, nunca para la guerra”, una guerra que vivió en carne propia. En agosto de 2001, su abuelo paterno Salomón Rafael Arias fue asesinado; tres años después, en agosto de 2004, su tío Fredys Antonio Arias corrió con la misma suerte, ambos a manos de grupos paramilitares. Este sábado 13 de febrero la tragedia le tocó a él, al no poder vencer el covid y morir en un hospital de Barranquilla tras ser trasladado de urgencia desde Valledupar
Desde el año 2002, se desempeñaba como Consejero Mayor de la ONIC. Dentro de sus luchas, resaltaba el fortalecimiento de la justicia propia indígena, la creación de la Guardia Indígena Nacional, la coordinación de espacios para evaluar el cumplimiento de los acuerdos logrados en el marco de los escenarios de concertación entre los pueblos indígenas y el Estado colombiano y la implementación de medidas para proteger, recuperar y reproducir la historia de las luchas de los pueblos indígenas, y de sus líderes.
Con esas experiencias y su empeño en la paz, hizo parte de la tercera delegación de víctimas que participó en La Habana (Cuba), en el marco de los diálogos de paz que sostuvo el Gobierno Nacional y la guerrilla de las FARC. Fue clave en la consolidación del capítulo étnico del Acuerdo de Paz, donde trabajó en la consulta previa para reconocer la garantías de los pueblos indígenas y afro en la implementación del acuerdo.
El consejero fue el responsable de entregar el primer informe de afectaciones individuales y colectivas de los pueblos indígenas en Colombia, en el marco del conflicto armado, desde 1958 hasta 2017 a la Jurisdicción Especial para la Paz. Su liderazgo fue clave en la articulación del movimiento indígena con organizaciones sociales y el Estado Colombiano. Logró, junto a otros, la Cumbre Agraria, Campesina, Étnica y Popular.
Luis Fernando Arias también fue fundador del partido Mais, en medio de su liderazgo, afrontó múltiples amenazas de muerte, una de ellas el año pasado por parte de grupos paramilitares de la zona de los Montes de María.
Arias estuvo hospitalizado en el Instituto Cardiovascular del Cesar, en Valledupar. Después de haber advertido en meses anteriores que la población indígena era una de las más propensas a contagios masivos de covid-19. Varias figuras públicas pidieron, en su momento, su urgente traslado a Barranquilla, como en efecto se realizó, pero a pesar de esto no pudo superar el virus que lo atacó con severidad.
#ATENCIÓN| Desde @ONIC_Colombia solicitamos de manera URGENTE al @ICVC_CESAR la remisión y la historia clínica actualizadas de nuestro Consejero Mayor @luiskankui para que se efectúe el traslado INMEDIATO a un hospital con garantías. @Supersalud @SecSaludVpar. #SaludTotalEPS.
— Organización Nacional Indígena de Colombia - ONIC (@ONIC_Colombia) January 19, 2021
Su muerte se produjo este sábado en una clínica de Barranquilla, tras enfrentar las complicaciones generadas por el coronavirus que había adquirido en enero. El homenaje de despedida fue con un adiós con música de gaita y chicote, el Pueblo Kankuamo recibió a Luis Fernando Arias Arias, para lo que ellos denominan, su retorno a la madre tierra.
#ATENCIÓN| Inicia la ceremonia de siembra de nuestro querido Consejero Mayor Luis Fernando Arias Arias, hoy retorna al seno de la Madre Tierra.
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🍃 #LuisFernandoEsUnidadYPaz 🍃 pic.twitter.com/YcAWLNIzM6
— Organización Nacional Indígena de Colombia - ONIC (@ONIC_Colombia) February 15, 2021
Luis Fernando Arias es la segunda autoridad indígena que muere por COVID, en Agosto del año pasado murió José de los Santos uno de los gobernadores Arahuacos de la Sierra Nevada de Santa Marta, quien tampoco pudo derrotar el virus en un hospital de la ciudad.
