Con un sentimiento de profunda aflicción fue recibido por el gremio médico el Decreto 676 de 2020, por medio del cual se admite el COVID-19 como una enfermedad laboral, pues la norma expedida por el Ministerio de Salud, si bien es un avance frente a la crisis, presenta vacíos relacionados con aspectos de suma importancia que fueron expuestos por sociedades científicas antes de su expedición y que generan detrimento de los derechos de todo el talento humano en salud.
Así lo hizo saber el presidente de la Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación, S.C.A.R.E., el doctor Mauricio Vasco, dado que el decreto desconoce el reconocimiento de prestaciones económicas, específicamente la incapacidad por aislamiento del personal de salud desde la sospecha del posible contagio de COVID-19, limitándolas a ser otorgadas solo frente a un diagnóstico confirmado de la enfermedad.
“En conclusión deja por fuera el reconocimiento de incapacidad al talento humano en salud cuando se le ordene aislamiento por sospecha de contagio previo al diagnóstico confirmado de COVID-19, lo cual es preocupante porque este aislamiento se ordena dentro de nuestra actividad asistencial y como consecuencia del riesgo directo de exposición que ha sido reconocido por el mismo Ministerio de Trabajo en las circulares expedidas”, afirmó. Lo anterior significa que en el momento en el cual un médico sea aislado por sospecha de contagio con el virus no percibirá ninguna prestación económica.
La sociedad científica que representa a más de 60 mil profesionales y ocupaciones del todo el sector salud también hizo saber que es igualmente grave que el decreto no genere la claridad sobre las obligaciones respecto a la entrega de los elementos de protección personal (EPP) por parte de las instituciones prestadoras de salud y/o las administradoras de riesgos laborales, dejando nuevamente este tema en una responsabilidad conjunta con la que se sigue presentando falta de oportunidad en la entrega.
“No hay plazos perentorios para esas entregas de EPP y conocemos casos reportados en los cuales los elementos de protección son entregados únicamente al personal que atiende pacientes con sospecha o confirmados con la enfermedad, limitando el reconocimiento de enfermedad laboral al resto del talento humano en salud”.
Menos aplausos y más acciones concretas
De igual manera, la Sociedad Colombiana de Anestesiología manifestó que los agradecimientos y aplausos al personal en salud se deben traducir en acciones concretas y sobre todo se deben cumplir los repetidos anuncios de proteger al gremio médico que en muchos casos quedan únicamente en circulares y resoluciones emitidas por el gobierno nacional pero no en la realidad del día a día del talento humano en salud.
“Son tiempos difíciles pero el sector salud debe ser una prioridad por el bien de nuestro país. Como anestesiólogos, estamos apoyando en primera línea esta pandemia junto con otros especialistas y profesionales de la salud, incluso sacrificando nuestra propia vida. Necesitamos que nos garanticen condiciones adecuadas para nuestro ejercicio y que las normativas generadas en el marco de la crisis sanitaria, contemplen realmente los diversos factores y situaciones que pueden llegar a poner en riesgo nuestra labor y bienestar”, fueron las palabras del especialista.
Finalmente la S.C.A.R.E. solicitó la modificación urgente del decreto para lograr una efectiva protección por parte del Estado colombiano a todo el personal en salud sin excepción, evitando afectaciones en sus condiciones laborales y su bienestar.