El arte colombiano es una revelación para el mundo entero, muchos artistas de esta tierra se han lanzado al mercado internacional sin mucha suerte y otros ya son un completo hit. Primero están aquellos que han triunfado en las casas de subasta más famosas e importantes del mundo como los son Sotheby’s y Christie's. Mujeres que son una revelación como María Berrío, que ha vendido sus obras en 1,159,200 USD, en promedio 4 mil millones de pesos, siguiendo los pasos del maestro paisa Fernando Botero. Pero aun más impresionate, conozca los colombianos en el MoMA que hacen historia.
Otros artistas que más allá de vender sus obras en las prestigiosas casas de subastas, están en los museos más respetados del mundo para que su arte sea contemplado. Uno de esos respetados lugares es el MoMA, Museum of Modern Art, es un museo de arte situado en el Midtown de Manhattan (Nueva York, Estados Unidos), en la intersección de las calles 11 Oeste y 53, y entre la Quinta y la Sexta Avenida. Es decir, el epicentro de la capital del mundo.
La lista no es muy larga, pero es sin duda un orgullo absoluto, la primera artista colombiana que hace historia en el MoMA es nada más y nada menos que Beatriz González, una bumanguesa nacida en el año 1923. Su obra se expresa a través del dibujo, gráfica y la escultura, tratando asuntos relacionados con el entorno histórico y cultural colombiano, expresa el dolor causado por la violencia y la muerte. Además representa a iconos de la cultura popular.
Su obra destacada en este museo, es un gigantesco papel de colgadura con tres expresidentes colombianos con penachos indígenas: Turbay, Carlos Lleras Restrepo y Belisario Betancur, acompañados por el Indio Amazónico. Su nombre es Plumario Colombiano de 1983.
Por otro lado está José Alejandro Restrepo, nacido en 1959, colombiano que es figura central del arte contemporáneo de América Latina. Desde hace treinta años, su obra dialoga con la imagen documental a través de una obra exhibida bajo diversos formatos y dispositivos, focalizada en la crítica de las relaciones entre arte, historia, medios, religión y política.
Su obra en el MoMA, es una videoescultura llamada Quindío Way I de 1992, donde reconstruyó el viaje del naturalista y explorador alemán Alexander von Humboldt en 1801 por los Andes del norte, muestra imágenes de su propio ascenso, a pie, del mítico paso del Quindío, conocido por su dificultada técnica de escalada.
Le sigue Olga Amaral, una artista visual colombiana nacida en 1932, conocida por sus obras abstractas a gran escala hechas con fibras y cubiertas de pan de oro y plata. Tiene dos colecciones en el MoMA, Rios 5. 1990 y Riscos IV. 1987, influenciada por los paisajes de su país. Lo hizo tejiendo lana y crin, es decir, crin de caballo.
Por otro lado, están dos colombianos que no son reconocidos como tal porque desarrollaron sus vidas en otros países. Se trata de Roberto Obregón, nacido en 1946 en Barranquilla y establecido desde 1952 en Venezuela, donde murió en 2003. Su obra El Agua como un ciclo de 1978, está en el MoMA.
La segunda es Gala Porras-Kim, una artista interdisciplinar contemporánea que vive y trabaja en Los Ángeles, sin embargo, nació en Bogotá en 1984 y vivió allí hasta los 12 años. Su obra es una serie de dibujos de trozos de tela, encontrados en un cenote mexicano; era un lugar donde se hacían sacrificios humanos para invocar la lluvia.
Recientemente, otro colombiano hizo historia en el MoMA, el museo compró siete de sus obras, se trata de Antonio Caro, un artista conceptual que comenzó sus trabajos hacia finales de la década de 1960. Basandose en formas no tradicionales que generaban críticas sobre asuntos de la política y la sociedad colombiana.
Las obras adquiridas por el MoMA son ‘Colombia Marlboro 1974′, ‘Colombia Marlboro 1975 (impreso 2015)’, ‘Manuel Quintín Lame (I) 1978′, ‘Todo está muy Caro 1978′, ‘Homenaje a Manuel Quintín Lame (Homenaje a Manuel Quintín Lame) 1993′, ‘Colombia 2010′ (según original de 1976), y ‘Maíz-Maíz 2013′. Brillar en un museo internacional es razón de orgullo, y esta lista de colombianos sin duda han dado una alegría más a su país. Su talento y persistencia los han puesto donde están ahora. Representantes insignias del arte latinoamericano.
| Ver también: Los pintores colombianos que venden en Sotheby's
