"Mi porro me sabe a todo, lo bueno de mi región, me sabe a caña, me sabe a toro, me sabe a fiesta, me sabe a ron" — Pablito Flórez (q.e.p.d.)
Como buena cordobesa escuchar esta canción del compositor y músico Pablo Flórez Camargo, conocido comúnmente como Pablito Flórez, no solo hace evocar los movimientos candenciosos del porro, la alegría y el folclor sinuano; sino que a su vez, revive en mi paladar cada uno de los sabores que hacen rica la gastronomía de mi bella región: Córdoba.
¿Cuántas mañanas desayunamos una deliciosa bola e' gato con suero y queso amasaó?, ¿cuántas veces nos fuimos a donde la abuela o la tía que tiene la parcelita o la finca a comernos un delicioso sancocho de gallina criolla hecho en fogón de leña?, ¿cuántas veces nos deleitamos con una viuda de pescao'? o ¿cuántas veces peleábamos por la chicha o el mongo mongo en la Semana Santa?
Los sabores de la tierra cordobesa, los sabores del porro. Un cordobés que está fuera de su tierra se emociona cuando le mandan la encomiendita, que por lo general siempre lleva suero, queso, butifarra y bollo limpio o de coco. Esa cajita de cartón hace que los demás a veces nos vean como "corronchos", pero para mí y muchos más que se identificarán con este escrito, esa cajita de cartón viene llena de recuerdos.
En nuestra tierra, como en muchas otras, cada sabor y comida viene acompañado de recuerdos. Si muchos supieran el amor que le pone la abuela al hacer la bola e'gato para el nieto (a), la alegría que siente el padre cuando llega de arrear el ganado y encuentra esa olla de sancocho y la emoción que sienten las hijas que están fuera de sus casas cuando llega la Semana Santa y las mamás les mandan el tarro con el dulce de mongo, son todas esas cosas las que nos llenan el corazón de orgullo.
Orgullo el que también nos hace sentir el maestro Pablito cuando evoca todos estos sabores en esa canción: los sabores del porro.
Córdoba, al igual que otras regiones del país, no solo es conocida por la violencia y la corrupción, sino que además sus sabores traspasan fronteras regionales para hacer latir el corazón de quienes nacimos en el seno de ella.
