Los pastusos se convierten en el ejemplo de lucha por defender lo público, frente a la amenaza privatizadora. Nunca en Colombia pueblo alguno había podido echar para atrás la privatización de una empresa de servicio público. En una cantidad considerable de los municipios, los servicios públicos, agua, energía, aseo han pasado a manos de las empresas multinacionales privatizadoras. En la ciudad sorpresa, el manejo de las basuras está en manos de EMAS, multinacional española que continúa re-colonizando a los colombianos a altos costos en el cobro de tarifas, y mucha ganancia, porque las administraciones municipales les conceden grandes gabelas para que realicen la actividad en condiciones demasiadamente favorables para los operadores. Quién lo iba a creer, fue Antonio Navarro quien entregó a los re-colonizadores el servicio de aseo.
La actual administración de Harold Guerrero López pretendió hacer lo mismo con EMPOPASTO, la empresa que en Pasto, presta los servicios de acueducto y alcantarillado. Esta empresa de más de setenta años, tiene en patrimonio que sobrepasa el billón de pesos, entre plantas de tratamiento, espejos de agua, redes de acueducto y alcantarillado. Con el apoyo del gobierno nacional, que puso doce mil millones de pesos y con cinco mil millones que aportó la empresa se pudo sanear sus finanzas y reestructurar su planta de personal. En este contexto la Junta Directiva de EMPOPASTO, donde la administración municipal tiene la inmensa mayoría de miembros, en el nefasto pasado martes de semana santa, mientras la gente estaba en santo recogimiento, los miembros aprueban por unanimidad poner en venta el 49% de la empresa dizque para modernizarla.
El acto ha sido considerado ilegítimo porque no se consultó a los usuarios e ilegal porque el artículo 313 de la Constitución Nacional determina que en caso de creación, liquidación, o cualquier tipo de transacción económica, debe ser el Concejo Municipal quien autorice.
Por otro lado, los miembros del Movimiento Social por la defensa del Agua denunció que para atraer la inversión de las multinacionales extranjeras, la Junta de EMPOPASTO devaluó los activos de la misma, rebajándolos de un billón a 180 mil millones para que la potencial socia únicamente invirtiera 12 mil millones.
En el mes de junio, el Movimiento Social por la defensa del Agua promovió la realización de un Cabildo Popular, donde aprobaron el denominado Mandato en defensa del agua, que fue acogido como parte del programa de gobierno por cuatro de los candidatos a la alcaldía, a excepción por supuesto del derrotado candidato oficialista Gustavo Nuñez de Cambio Radical.
La actitud del burgomaestre ha sido de desconocimiento a las organizaciones populares y sus dirigentes. El movimiento poco a poco fue cogiendo fuerza entre la ciudadanía, realizó varias acciones de protesta y movilización, hasta el punto incluso de llevar a los parlamentarios nariñenses a presentar una carta de rechazo a la privatización.
Igualmente, el procurador Alejandro Ordóñez envió una carta al alcalde en la que le solicitó suspenda el proceso de privatización. El Movimiento Social por su lado, a la par que invita a la ciudadanía a movilizarse en las calles, también ha interpuesto demandas ante los tribunales respectivos.
La noche del 24 de noviembre, vísperas de la realización de la Gran Marcha por la Defensa del Agua y EMPOPASTO, y en la cual el pueblo pastuso definirá la fecha de un Paro Cívico Municipal Indefinido, sorpreisavente Harold Guerrero López convoca a una rueda de prensa en la que se limitó aleer una carta dirigida al Procurador Ordóñez manifestando su decisión de suspender el proceso y que sea la nueva administración quien decida.
A pesar de esta posición, los pastusos salieron el 25 a la calle, ratificaron su decisión de mantenerse en pie de lucha, y el alcalde electo Pedro Vicente Obando, ante una gran muchedumbre reiteró su posición de impedir la privatización de EMPOASTO.
Este hecho es trascendental, y es un ejemplo a seguir por los colombianos, para parar de una vez por todas el modelo neoliberal que a nivel del manejo de la cosa pública y del estado quiere privatizarlo todo en beneficio de los grandes conglomerados nacionales y las multinacionales.
Finalmente, esta derrota a la privatización es más significativa si se tiene en cuenta el valor estratégico que tiene el agua nivel mundial. El movimiento estuvo en gran parte orientado por el pensamiento del papa Francisco quien ha planteado que el agua es un derecho de la humanidad y por lo tanto no es negociable..
