Aunque la historia del Aguardiente Amarillo de Manzanares se remonta a 1885, lo que le permite ser la bebida de su tipo más antigua del país, no fue sino hasta esta década que se comenzó a disparar su popularidad a niveles nunca imaginados para la Industria Licorera de Caldas (ILC) y más de 5,7 millones de botellas vendidas en un solo semestre lo demuestran.
Hay muchos motivos que han llevado a que el Amarillo se haya convertido en uno de los tragos favoritos para amenizar fiestas y reuniones en los últimos años. Uno puede ser, por ejemplo, el hecho de que “entra suave” en comparación con otros licores, como dicen muchos jóvenes. Pero, lo que realmente lo ha catapultado han sido los problemas legales de la ILC con otras licoreras como como la de Antioquia o la de Cundinamarca, puesto que no ha dejado de aparecer en redes y en todos los medios.
Primero, la Licorera de Cundinamarca prohibió la comercialización del Amarillo en el Departamento y luego, la Fábrica de Licores de Antioquia sacó una presentación bastante similar a la que llamó Aguardiente Real, lo que generó demandas y acciones de parte de la Superintendencia de Industria y Comercio dirigida por Cielo Rusinque.
Esas 5,73 millones de botellas vendidas entre enero y junio de 2024 representan un aumento del 89% con respecto a las que se vendieron en el mismo periodo de 2023. Algo que contribuyó bastante a que las ventas generales de aguardientes, contando el Cristal, aumentaran un 65% y a que las utilidades de la compañía crecieran un 25,2 % llegando a $17 mil millones.
Además, el Amarillo no solo se toma en Colombia, a excepción de Cundinamarca, sino que ya logró traspasar fronteras y ser vendido en otros países como Estados Unidos, a donde aterrizó en marzo de este año después de meses de trámites; así como España, Italia, Suiza, Austria, Panamá, Chile, Perú, y Ecuador. Algo importante teniendo en cuenta que sus exportaciones crecieron un 32,3 %.
Los caldenses no se conforman
Ahora, con miras a seguir posicionando al Amarillo entre los licores más apetecidos, la ILC que tiene como gerente a Diego Angelillis Quiceno anunció una nueva presentación, que será una garrafa de 1.5 litros con la que aumentarán la demanda.
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