Tenía 23 años recién cumplidos. Alejandro Valverde, su líder, tuvo una rotura de su rueda trasera en una etapa llana en ese Tour del 2013 donde esperaba llegar vestido de amarillo. Perdió 8 minutos en esa etapa surcada por los vientos. El joven de Cómbita, en su segunda vuelta grande, pasó de ser gregario de confianza a líder. En la etapa con llegada al Mount Ventoux protagonizó un duelo descomunal con el súper astro Chris Froome. Al final Nairo ganaría la camiseta al mejor joven, la montaña y segundo del Tour. Impresionante.
Los especialistas ese año aconsejaban dejar descansar al joven prodigio. Podría agotarse. Por lo general un ciclista llega a su esplendor a los 27 años. A esa edad ganó la primera Induraín, Mercx, Hinault, Froome. Había que llevarlo con calma. Pero Nairo tenía hambre y el Movistar también. En el 2014, a los 24,Nairo ganó el Giro de Italia y corrió una Vuelta a España que no terminó. Un año después ganó la Tirreno Adriático y las vueltas menores que disputó. Disputó el Tour e inmediatamente, mes y medio después, completamente agotado, corrió una Vuelta a España en donde quedó cuarto. En el 2016 empezó a verse la peor versión de Nairo. Si, ganó la Vuelta, pero en el Tour empezamos a ver sus primeras crisis. Nadie había corrido tanto como él. En el 2017 vendría su peor año. No pudo con Dumoulin en el Giro y en el Tour, absolutamente acabado, terminó 12. Ganó, eso si, todas las carreras medianas que corrió. Pero está claro que Nairo no está progresando, al contrario, se estancó.
Sus rivales de generación, al contrario, están progresando. Mikel Landa es su rival directo en el Movistar. Lo contrataron porque ya, dentro del equipo español, no confían en él. Creo que este año Warren Barguill lo derrotará. Dumo ya lo hizo. Nairo ya no tiene explosión. Es un viejo a los 28 años. Ojalá que con los dos nuevos astros, Superman López y Egan Bernal, no cometan el mismo error. El ciclismo acaba las piernas y hay que saber dosificar los esfuerzos. Superman, a sus 24 años, tiene una sola vuelta entre sus piernas. A esa edad nairo ya tenía cuatro. A Egan lo pondrán a debutar el próximo año, con 22 y sin ningún tipo de presión.
Nairo tiene la maldición de haber madurado rápido. Ojalá me equivoque pero me parece que los mejores años del boyacense ya terminaron. Terrible. Este año se juega tal vez la última carta para ganar el Tour