Dos grandes firmas constructoras competían por el tramo Buga-Buenaventura de las obras 5G que busca acortar el tiempo de conexión del centro del país con el puerto sobre el Pacífico: la cuestionada empresa española Sacyr Concesiones Colombia y Proyectos y Desarrollos Viales del Valle (Prodevivalle) que hace parte de Corficolombiana, es decir, del Grupo Aval.
La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) adjudicó el megaproyecto 5G que contará con inversiones de $4 billones, de los cuales $2,21 billones serán en obra y $1,84 billones en operación y mantenimiento en el último dia hábil del gobierno Duque, a 72 horas de irse.
El proyecto de pliego de condiciones para la Asociación Pública Privada – APP que se publicó el pasado 13 de octubre de 2021, tendrá inversiones por el orden de los $4,05 billones ($2,21 en obra y $1,84 de operación y mantenimiento). La longitud concesionada de 128 km, con un corredor en segunda calzada a lo largo de 116.1km. Asimismo, prevé la rehabilitación, operación y mantenimiento de la vía existente. El proceso de construcción está dividido en varias etapas: la preoperativa tendrá una duración de cinco (5) años divididos así: fase de preconstrucción, un año y medio (1,5); fase de construcción, tres años y medio (3.5). Asimismo, la etapa de operación y mantenimiento será de veinticuatro años. Con las obras, el Gobierno nacional busca reducir los costos logísticos para las empresas de carga al disminuir los tiempos de desplazamiento, pasando de 2,5 horas a 2 horas. Eso traduce un ahorro del 20%.
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