El 8 de febrero de 2010, un mes antes de lo anticipado, la Casa Editorial El Tiempo, en la que esa época tenía acciones el entonces precandidato presidencial Juan Manuel Santos, cerró la revista Cambio y despidió a Rodrigo Pardo y a María Elvira Samper. La decisión se dio, aparentemente, por las fuertes críticas al gobierno de Uribe y por el destape del escándalo de Agro Ingreso Seguro.
El 13 de octubre de ese año, la misma casa editorial despidió a la columnista y politóloga Claudia López por criticar en una de sus columnas la forma en que la línea editorial del periódico El Tiempo había abordado el tema de Agro Ingreso Seguro. En ese momento Daniel Coronell, despedido este 28 de mayo de Semana a raíz de la columna en la que criticó la forma como la revista manejó un informe sobre el regreso de las ejecuciones extrajudiciales, dijo en entrevista a BBC Mundo: "Es una arbitrariedad contra alguien que cuestiona al gobierno... se trata de un muy mal precedente para el periodismo y para el país".
En febrero de 2015, el columnista Yohir Akerman se vio obligado a renunciar al periódico El Colombiano porque su columna criticaba un concepto enviado por la Facultad de Medicina de la Universidad de la Sabana a la Corte Constitucional en medio del debate de la adopción homoparental y porque escribió "dios" en minúscula. Aunque las agencias son libres de escoger con quién trabajan, como lo manifestó Coronell ante la salida de León Valencia de Semana en septiembre de 2017, ¿no son todos los anteriores casos de censura?