Doctora
MARÍA ÁNGELA HOLGUÍN
Ciudad
Mi nombre es Magdalena Medina, soy la madre de Juan Pablo Iragorri Medina, el paracaidista que se encuentra en una cárcel en Qatar, condenado a cadena perpetua. Le cuento señora Canciller -aunque usted no lo crea- en Colombia hay mucha gente decente y entre los Colombianos bien educados profesionales y orgullosos de ser colombianos está mi hijo Juan Pablo Iragorri.
Desde que empezó este calvario, yo solicité una cita con usted y solamente por generosidad del Dr. Álvaro Calderón, el año pasado, quien tenía una cita con usted, me hizo pasar a su despacho. Le conté del atropello cometido contra un hombre que ha viajado por muchos países contratado como paracaidista y sin ningún problema; con una hoja de vida impecable. Pero, creo que usted tenía cosas más importantes por la forma en que me recibió.
En junio de 2014, viajé a Qatar a la última audiencia de Juan Pablo. Conocí al Dr. Najeeb -Abogado defensor de mi hijo- exministro de Justicia y defensor de los Derechos Humanos, recomendado por Amnistía Internacional. En ese momento conocí al Dr. Rafael Arismendy, cónsul general de Colombia en ABU DHABI.
Le rogué al Dr. Arismendy que hablara con el Dr. Najeeb, quien conocía la realidad del problema de mi hijo. Su respuesta fue: “A mí no me permiten hablar con nadie”. Le pregunté si había leído algo de las audiencias (llenas de irregularidades) y la respuesta fue: “A mí no me permiten leer nada”.
Lamento contarle que la actitud del Dr. Arismendy está muy de acuerdo con su actitud en los pocos minutos que se dignó a oír a una madre desesperada. Los colombianos para usted ,señora ministra, somos BASURA. No importa que seamos parte de esos colombianos, correctos, decentes, cumplidores de nuestras obligaciones, siempre nos tratan como BASURA. Mientras tanto drama nos agobia a los colombianos, usted defiende al presidente Maduro de Venezuela.
Se me olvidaba que para usted solo valen los Presidentes, Reyes y Príncipes.
Atentamente,
Magdalena Medina Alzate