Temer, de 76 años, llegó al poder hace un año tras la destitución por el Congreso de la presidenta de izquierda Dilma Rousseff, de quien era vicepresidente. Según O Globo, Temer instó a Joesley Batista, dueño del mayor procesador de carne del mundo JBS, a seguir pagando sobornos al expresidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha para comprar su silencio e impedir que obtuviera un acuerdo con la justicia que perjudicara a altos funcionarios del gobierno, le habría dicho “Tienes que mantener esto”.
Cunha se encuentra encarcelado y condenado en marzo a 15 años de cárcel por su implicación en las investigaciones de corrupción en Petrobras. La grabación, que hasta ahora no fue difundida, habría sido realizada por el propio Batista fue entregada a los fiscales de la Operación Lava Jato para obtener una delación premiada con una futura reducción de penas tanto de Batista como su hermano, Wesley Batisa, presidente ejecutivo de JBS. Temer le aconsejó luego dirigirse al diputado Rodrigo Louras Rocha para resolver un litigio legal de JBS. Existen imágenes filmadas por la PF, según Globo, que muestran a Batista entregando una maleta con 500.00 reales (160.000 dólares al cambio actual) a ese legislador. Temer admitió que se reunió con Batista, pero aseguró que jamás solicitó pagos para obtener el silencio del exdiputado Eduardo Cunha. Hasta ahora nadie ha oído la grabación y el gobierno niega su existencia. La Fiscalía general no ha confirmado ni desmentido su existencia.
Temer y Cunha fueron los grandes artífices del impeachment que sacó del poder a Rousseff, acusada de manipular las cuentas públicas, después de haber sido su aliado como fórmula vicepresidencial para ganar las elecciones y llegar al poder. Ya en el gobierno traicionó a la Presidente y terminó quedándose con el cargo. La destituida mandataria, así como su Partido de los Trabajadores (PT), acusan a Termer y Cunha de "golpistas". El partido opositor Rene y el Partido Socialista están al frente de la solicitud de renuncia del Presidente.
Y en las calles empiezan a oírse reclamos de "Directas Ya", una consigna que movilizó a millones de brasileños al finalizar la dictadura militar que duró veinte años de 1964 a 1985. A pesar de la situación judicial del ex Presidente Jose Ignacio Lula acusado de haber recibido sobornos del gigante brasilero de la construcción Odebrecht y de corrupción en Petrobras, sigue siendo el líder político con mayor respaldo popular en el Brasil, visto incluso como opción presidencial.