A finales del año pasado ocho millones de colombianas aprovechaban las cerca de once plataformas utilizadas que ofrecían los bancos y emprendimientos financieros o fintech para realizar transacciones. La ventaja estaba sobre todo en lo fácil de hacerse a una, sin el papeleo de los bancos y un costo mínimo de uso.
La ventaja la habían tomado las Apps Daviplata y Nequi, seguidos por BBVA Wallet. Pero las aplicaciones fintech como Tpaga o Movii, se posesionan cada día más entre las personas no bancarizadas (sin cuentas en entidades financieras), que es el 65 % de la población.
Efraín Otero, el presidente de Davivienda fue uno de los pioneros con su aplicación Daviplata que fue lanzada en abril de 2011 como una unidad de negocio completamente independiente del banco, y tomó la delantera. Supo aprovechar la robusta red de pagos del banco: Redeban.
En sus inicios era básicamente una billetera electrónica, pero ha logrado atraer a más de 3,2 millones de clientes aprovechando el impulso dado por el gobierno al seleccionarlos como la plataforma para otorgar los programas de subsidio como Familias en Acción (pagan un millón cada dos meses), la reciente devolución del IVA a estas Familias en Acción que hagan parte de estratos socioeconómicos uno y dos, y los pagos que reciben las víctimas en zonas lejanas del territorio nacional. Ya hay unos 60.000 soldados del Ejército usando Daviplata para hacer sus pagos o giros a sus familias desde regiones alejadas.
Daviplata se ha consolidado como herramienta para el pago de nóminas de bajo valor de muchas Pymes, así como para el pago de premios o comisiones. De igual manera, a través de la alianza con Rappi implementó el año pasado Rappipay que permite la transferencia de dineros entre usuarios, retiros en cajeros automáticos, pagos en comercio, así como el pago de los servicios de la plataforma.
Bancolombia lanzó en 2017 su plataforma Nequi, un neobanco independiente que ofrece todo tipo de transacciones y giros a clientes y no clientes. Aunque dispone del respaldo de Bancolombia su funcionamiento es independiente, tanto que las líneas de atención y las sucursales de Bancolombia no atienden a usuarios de Nequi.
La aplicación se descarga en el celular y en cuestión de minutos se puede abrir una cuenta de ahorros. Solo es necesario ser mayor de trece años, tener un documento vigente y una línea de celular de un operador en Colombia. Una vez este activa la cuenta, es posible obtener una tarjeta Nequi, a través de la cual se realizan múltiples las transacciones: ahorrar, realizar giros de celular a celular y pagos con códigos QR, o a través de PSE en algún sitio web. La cuenta se puede recargar en línea, en puntos físicos y realizar retiros gratuitos en toda la línea de cajeros de Bancolombia.
Este año, de la mano de la presidente del Aval Digital Labs, el Grupo Aval lanzó Dale! Una plataforma de pagos para personas jurídicas y naturales, clientes y no clientes del Grupo Aval, que permite cargarla en cualquiera de los corresponsales del Grupo Aval, vincular tarjetas de crédito de cualquier entidad o cuentas de ahorro o depósitos del grupo, para realizar pagos en comercios físicos o en línea y transferencias.
El proceso de apertura no necesita papeleo y dura pocos minutos. Los usuarios pueden recargar Dale! desde cuentas de ahorro o corriente de cualquier banco (a través de PSE) o recibiendo una transferencia de otro usuario de la App. Próximamente también podrán hacerlo con tarjetas de crédito y débito de cualquier banco. Además, podrán hacer uso de la red de Aval en más de 3.500 cajeros para retirar su dinero. Los cuatro bancos del grupo, AV Villas, Banco de Bogotá, Banco de Occidente y Banco Popular, son accionistas de Dale!
Andrés Gutierrez y Juan Salcedo luego de su exitoso Tappsi, le apostaron a la billetera móvil cuando intentaron implementar el pago con tarjetas en los taxis, y se dieron cuenta que el dinero recibido por parte de los pasajeros era imposible abonarlo al taxista, debido a que estos normalmente no poseen cuenta bancaria.
Decidieron entonces, junto con Sebastián Ortiz, crear su propia billetera electrónica para teléfonos inteligentes y adaptada al mercado colombiano. En su servicio original, Tpaga le ofrece a las empresas un mecanismo de pago a sus empleados o habilitación de saldos para viáticos desde donde se controla el gasto. Hoy en día, además, los usuarios pueden vincular tarjetas de crédito o abrir un producto financiero 100% digital.
A través de la plataforma se puede pagar facturas de servicios públicos, televisión, internet, salud, educación, seguridad social, recargar celular, retirar efectivo a través de la red de pagos y servicios PTM, etc. Así como realizar compras en varios establecimientos de comercio y comida, empresas de mensajería, combustible, talleres, etc. Asimismo, las tiendas de barrio y las plazas de mercado están recibiendo por primera vez pagos electrónicos.
Todas estas plataformas, que cuentan con la infraestructura para hacer autenticación y validación de identidad requerida, permiten a través de los celulares inteligentes pagar productos y servicios, realizar transferencias de dinero de persona/entidad a persona, entre otros servicios financieros. Sin contar con ser una opción que permite realizar pagos sin contacto físico y minimizar la transmisión de todo tipo de bacterias y virus a través de billetes, disminuir las visitas al cajero electrónico y la circulación de los plásticos de las tarjetas por muchas manos. El gobierno nacional y local las tendrá que utilizar para la distribución de subsidios o la devolución del IVA a una población que es 48 % informal, ubicada en rincones y barrios donde no hay cajeros o puntos de redes de pago, y que ante esta pandemia verá limitada su movilización
La pandemia del coronavirus traerá varios cambios de hábitos, el teléfono como medio de pago parecería ser uno de ellos. Un mercado con potencial, puesto que existen 29 millones de colombianos con accesos a internet móvil, de los cuales cada vez aumenta más el número de celulares inteligentes.