La decisión que tomó la Corte Constitucional puso en jaque el acuerdo de paz al quitarle al presidente la facultad para defender el acuerdo firmado por las Farc y el gobierno. Carlos Bernal, quien regresó al país hace ocho meses después de haber estado en el mundo académico 16 años en Australia, se estrenó con una posición radical en la sala plena. Llegó decidido a tumbar el espíritu del Fast track.
Lo acompañaron en la decisión dos magistrados nariñenses: el presidente de la Corporación Luis Guillermo Guerrero y Gloria Ortiz; y dos magistrados encargados quienes tomaron posesión de sus cargos de manera provisional desde marzo, Iván Escrucería quien ocupó el cargo en lugar de Jorge Iván Palacio y José Antonio Cepeda.
Paradójicamente, Carlos Bernal, graduado y docente del Externado, está en la Corte por iniciativa de quien fuera uno de los arquitectos del capítulo de justicia del Acuerdo de Paz, que incluye la JEP y el Fast track: Juan Carlos Henao, el rector de su Alma Mater