Después de 18 horas de vuelo, a las 2:00 am (hora local) el presidente Gustavo Petro aterrizó en el Aeropuerto Internacional Al Maktoum acompañado de su comitiva en la que está el presidente de Ecopetrol Ricardo Roa y cuatro ministros, que si bien, presentaron su carta de renuncia, no se sabe aún su suerte. Por el momento, los 5 ministros renunciados que Petro llevó a Dubái están respondiendo a agendas trazadas con anticipación.
Están con los recién nombrados Laura Sarabia en la Cancillería y Yannai Kadamani en Cultura; el ministro de Comercio, Luis Carlos Reyes; el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho y la ministra de Ciencias, Yesenia Olaya. El encargado de responder al tema de las TICs es Belfor García después de la salida de Mauricio Lizcano.
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En diciembre ya había estado el canciller Luis Gilberto Murillo en Qatar a donde irá el Presidente para asistir en el Foro de Doha. Murillo sostuvo una reunión bilateral con el Ministro de Estado de Relaciones Exteriores de Qatar, Sultan Bin Saad Al Muraikhi y donde se destacaron avances claves en la relación bilateral y se proyectaron iniciativas estratégicas para el futuro.
El Emir de Qatar a Colombia, Jeque Tamim bin Hamad Al-Thani, ya había estado de visita en Colombia visita en la que se suscribieron cinco instrumentos de cooperación en áreas como comercio, turismo, ciencias, seguimiento que harán los respectivos ministros. El Presidente Petro adquirió entonces el compromiso de visitar el Estado de Qatar en febrero del 2025 como en efecto lo está haciendo.
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En Dubái esperaban al Presidente y su comitiva, el sincelejano Luis Miguel Merlano, Embajador en Emiratos Árabes Unidos e hijo del empresario Remberto Merlano, más conocido como el Mono Merlano, y cuyo nombre llegó por vía de la Primera Dama, su coterránea Verónica Alcocer. Merlano papá tiene una de las fortunas más grandes de Sucre que lo han colocado en las grandes ligas del sector eléctrico hasta tener el músculo para la adquisición de Termocentro a Isagen, de propiedad del fondo de inversión canadiense Brookfield desde enero del 2016 y por la que le pagó al gobierno colombiano USD 2000 millones.
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La Cumbre Mundial de Gobiernos es un evento que se realiza periódicamente en Dubái con el Primer Ministro y Jeque Mohammed Bin Rashid Al Maktoum como anfitriones, esta vez de América Latina, solo asistieron el presidente Gustavo Petro y el presidente de Guatemala Bernardo Arévalo. El plato central este año es el billonario y poderosos en el gobierno Trump, Elon Musk quien anunció una multimillonaria inversión de mil millones de dólares en Dubái aprovechando que la innovación y tecnología son el tema que los convoca. En su primer discurso el presidente Petro se refirió a Musk como un magnate “esotérico y loco”.
El presidente Petro les pidió invertir en Colombia para el tema de la tecnología e inteligencia artificial. No es lo único que buscaba, también quiere que inviertan en café en Colombia ya que así el país sería más independiente y la deuda externa no estaría en unas solas manos refiriéndose a Estados Unidos, teniendo en cuenta que ya son varios los renglones de exportación.
Tanto el Presidente Juan Manuel Santos como Iván Duque ya habían hecho este periplo a los Emiratos Árabes, así como el empresario Jaime Gilinski quien logró el apoyo societario para la adquisición de la multinacional Nutresa, una sociedad que se disolvió en la reunión de Davos de comienzos del año, cuando Gilinski le recompró la inversión de USD 2 mil millones a los árabes dueños del fondo.
